
Así parece que van los equipos regiomontanos en la recta final del Apertura 2010, donde incluso Rayados y Tigres podrían revivir la historia de los duelos Clásicos en la fiesta grande del futbol mexicano.
El Monterrey se quitó ya de encima la presión del invicto al perder en la jornada 14 frente al Cruz Azul en el mismísimo Tecnológico, en una derrota que al final se vio desproporcionada (4-2 el marcador), pues en ese partido los dirigidos por Víctor Manuel Vucetich hicieron todo lo posible por perder y poco por ganar.
Sin embargo, de inmediato se recuperaron y fueron a Morelia a ganar 2-0 de visitantes y a volver a instalarse como uno de los grandes favoritos al campeonato, junto al Cruz Azul, pues a pesar de ir a la capital michoacana sin sus delanteros estelares, Suazo y De Nigris, además de Osorio y Basanta, los principales pilares defensivos, todos ellos por lesiones musculares.
Hoy por hoy, Rayados y Cementeros son los más fuertes candidatos al título del Apertura 2010, por lo que se perfila una nueva batalla en la final entre estos dos equipos, que se midieron por el campeonato del Apertura 2009, donde los regios se alzaron con el campeonato.
Vucetich ya se dio cuenta que sus jugadores vienen con una carga importante de trabajo por estar en dos competencias al mismo tiempo, la liga y la Concachampions, por lo que ya empezó a dosificar el esfuerzo y a darles descanso y así lograr que todos lleguen al 100 por ciento al inicio de la Liguilla.
Al Monterrey le quedan dos compromisos en el calendario regular, visitando al Puebla y cerrando en casa frente a las Chivas, dos rivales que ya no tienen aspiraciones de ir a la lucha por el campeonato y, por ende, se perfilan como viables víctimas para buscar arrebatarle el superliderato al Cruz Azul y así lograr cerrar en casa toda la postemporada.
A La Máquina, que tiene 35 puntos por 32 de los regios, le resta enfrentar a las Chivas y cierran frente al San Luis, por lo que podría ser que hasta la última fecha se decida al superlíder de la competencia.
POR EL LADO DE LOS TIGRES…
El conjunto universitario lleva ya cinco fechas sin conocer la derrota, con tres victorias y dos empates, lo que les ha permitido irse alejando de la zona de descenso paulatinamente, ubicándose hoy en el lugar 11, luego de haber empezado el torneo en el 17.
Poco a poco se va viendo la mano de Ricardo Ferreti en este equipo, donde partido a partido se ha sentido un futbol más colectivo, donde las individualidades ya juegan para el conjunto y no para el lucimiento personal.
Elementos como Lucas Lobos, Damián Álvarez e Itamar Batista han empezado a carburar entre sí, conectándose en la delantera y por consiguiente dando resultados en el marcador para un equipo que los torneos anteriores no tenía motivos para festejar y sus aficionados nada para ilusionarse.
El Tuca le ha devuelto a estos Tigres la ambición por ganar, el gusto por el trabajo y a sus aficionados la posibilidad de festejar algo, incluso hoy en las calles los hinchas felinos se envalentonan con un duelo ante Rayados en la Liguilla.
Tigres llega con 23 puntos a las últimas dos fechas del torneo y si es capaz de vencer a Morelia en casa y al Atlas como visitante estaría cerrando con 29 unidades y entre los cinco o seis mejores equipos del torneo.
Si los felinos logran meterse a la Fiesta Grande serán un rival muy incómodo, que tendrá todo que ganar y nada que perder, pues su objetivo principal al inicio del torneo fue alejarse lo más posible en la tabla porcentual y lo han logrado en un grupo muy fuerte, donde Rayados y Santos no han dejado de sumar puntos jornada a jornada.
Así es que a falta de dos jornadas para terminar el torneo regular en nuestra ciudad, ya se puede percibir el olor a Liguilla, pero no sólo en el campamento rayado, sino también en el de Tigres, por lo que seguramente en noviembre se vivirá toda una fiesta entre los aficionados de ambos equipos.
Hasta la próxima…
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