Sin duda que los Rayados con la contratación de César “Chelito” Delgado y los cinco jugadores del Tri que resultaron positivos en un control antidoping fueron las “noticias bombas” durante el draft de jugadores que se realizó en Playa del Carmen.
Y es que el Régimen de Transferencia del Futbol Mexicano va de mal en peor. En esta última edición no hubo contrataciones bombas, nada que valiera la pena todo lo que los medios de comunicación invirtieron para su cobertura.
Sin necesidad de darla a conocer, pues el “Chelito” no estaba inscrito en el Draft, el Monterrey volvió a demostrarle a todos los equipos que van un paso delante de ellos, simplemente porque cambiaron el chip hace un buen rato y ya no se conforman con “competir” localmente, sino que ahora piensan en grande, en especial en el Mundial de Clubes del próximo diciembre.
Eran las 17:40 horas del miércoles 8 de junio, cuando de pronto Luis Miguel Salvador salió de la sala de juntas y empezó a hablar por celular. Gesticulaba en demasía, movía las manos de un lado a otro, pero de pronto esbozó una enorme sonrisa de satisfacción. Volvió a la sala, para luego salir nuevamente y buscar al representante de Osvaldo Martínez, hablar unos cinco minutos y retornar a su sitio de negociaciones.
Cerca de las 18:00 horas, Salvador y Miguel Herrera salieron juntos al lobby del hotel, buscaron al agente de “Osvaldito”, acordaron algunas cosas y se fueron. Treinta minutos después, el presidente deportivo rayado hacía oficial que habían traspasado a Martínez al Atlante en forma definitiva y que estaban muy cerca de lograr la contratación del argentino César “Chelito” Delgado proveniente del Lyon de Francia, con quienes jugó hace unos meses los Cuartos de Final de la Champions League.
Las decenas de reporteros apostados en las afueras del hotel sede del draft empezaron a correr de un lado a otro. Era lo que esperaban, una noticia que valiera la pena las horas de estar en el sol, era un hecho, como dijo un periodista de ESPN, “Rayados acaba de romper la monotonía de este draft”.
Al día siguiente, ya cerca de las dos de la tarde, Decio de María, secretario General de la FMF, volvió a quitarle el aburrimiento al draft de la Liga de Ascenso al destapar una noticia que nadie esperaba: cinco jugadores del Tri había dado positivo por clembuterol en un análisis interno de la Federación y eran separados del seleccionado que participa en la Copa Oro.
Javier “Maza” Rodríguez, Guillermo Ochoa, Sinha, Édgar Dueñas y Christian “Hobbit” Bermúdez eran los elementos que estaban en el ojo del huracán y que, de acuerdo al informa de De María, habían sido infectados por esta sustancia por carne de pollo que comieron en el Centro de Alto Rendimiento de la FMF.
Ya nadie se acordó del Régimen de Transferencias de la Liga de Ascenso, ni de lo denigrante que era ver a cerca de 200 jugadores sin equipo que mendigaban una oportunidad a las afueras del hotel y que uno a uno fueron desfilando por las mesas de los equipos en busca de una posibilidad de seguir “viviendo de la patada”.
Los cinco “dopados” viajaron a Los Ángeles para hacerse una segunda prueba en la UCLA para confirmar que dieron positivo debido a la ingesta de carne contaminada y no por medicamentos prohibidos, lo cual les podría acarrear una suspensión de dos años de toda competencia internacional.
No cabe duda, la semana anterior el caribe mexicano esperaba ser noticia por lo que se negociara en el draft, sin embargo, las dos noticias más importantes las dieron los Rayados con la repatriación del “Chelito” Delgado y la FMF con el caso de los cinco jugadores dopados por carne de pollo con clembuterol.
Así es nuestro futbol…
Hasta la próxima…