
Resulta que para la Presidencia de la República y los mercenarios de las telecomunicaciones en el país, en Nuevo León existe prensa de primera, de segunda y de tercera.
Aquí esta la prueba.
El menú para los picateclas en la comida–inauguración de la Expo Canitec 2010 fue, de entrada: ensalada de bacon con queso de cabra con ceniza vinagreta de fresa.
La sopa: crema de pepino con eneldo y como plato fuerte, suprema de pollo con costra de almendra y salsa de champiñones fritos. La guarnición: champiñones y soufflé de espinacas.
Y de postre: especial de manzana, panacota con salsa de fresa y dedos de reyna.
Estas delicias fueron acompañadas con whiskey, tequila, refrescos, limonadas y ginger ale.
Un ejército de capitanes y meseros se desvivieron para atender a los cientos de comensales, entre ellos los tragones reporteros, en el Salón TLC de Cintermex.
Pero a los camarógrafos y fotógrafos de la “prensa local de Monterrey”, el menú que les sirvieron, en un cuarto de a lado, junto a los baños fue:
Un lujoso Box Lunch, el cual contenía una bolsa de papas Sabritas, un lonche de jamón y una Coca Cola.
Corrieron con suerte los profesionales de la lente, porque a otros de los compas de los medios informativos ni siquiera los dejaron acercarse a escasos 20 metros de la ex Fundidora.
Esta actitud racista, incongruente, insultante y estúpida fue lograda gracias al manejo errático de las relaciones públicas de “los hombres del presidente”.
La cereza en el pastel para agraviar aún más a la prensa regia, la llevaron los de la Cámara Nacional de la Industria de Telecomunicaciones por Cable (Canitec).
Los de RP fastidiaron a varios compañeros de la prensa y fueron los que prohibieron que los camarógrafos y fotógrafos accedieran a su infame comilona.
Inclusive, una de las marionetas de Canitec les advirtió a los de la “prensa de casa” que los soberbios de Presidencia “andan suavecitos, no como siempre de pesados”.
Todo esto sucedió en los mismos momentos en que Felipe Calderón convocaba a la sociedad mexicana a unir fuerzas para erradicar al crimen organizado en el país.
Sin embargo, un crimen ya se estaba cometiendo en contra de las y los expertos detrás de las cámaras de foto y tv en esta Sultana del Norte.
Por cierto, el presidente de Canitec, Alejandro Puente, señaló en su discurso frente al primer panista del país, que “es indispensable continuar con una clara política de competencia”.
Ciertamente su gente que organizó el maratónico evento no tiene el mínimo nivel de competencia para tratar de manera respetuosa a las mujeres y hombres de los medios informativos.
Pero la bronca contra la prensa de Monterrey ya había empezado horas antes, ese negro miércoles 28 de abril de 2010.
Resulta que Presidencia de la República abrió un evento a la prensa, mismo que en su origen fue programado de manera privada, con el gobierno, los ipecos y las ONG de NL.
Llegaron varios fotógrafos, camarógrafos y reporteros a la sala de prensa de los calderonistas, en el Salón Acero, del Hotel Holiday Fundidora, porque ahí fueron citados.
Un empleado de quinto nivel de la Presidencia, prepotente, pedante, le exigió a “los de la prensa de Monterrey” que se salieran de la sala “porque esto nada más es para los de Presidencia”.
Le ordenó a varios de sus colaboradores que guardaran todo lo que había en las mesas de las computadoras y de las copiadoras “porque aguas, ya está llegando la prensa local, no se vaya a perder algo”.
Por cierto, en la sala fue montada una atractiva barra de refrigerios con frutas, jugos, galletas, refrescos y sándwiches.
Los de la “prensa local” fueron corridos a un salón aledaño donde hubo una transmisión por circuito cerrado del “Programa Para Vivir Mejor Nuevo León”, encabezado por el michoacano presidente.
Varios guaruras de la misma Presidencia fueron apostados en las puertas para evitar en lo posible que los de “la prensa local” se filtraran a su sagrado recinto temporal.
Peeeero.
Luego surgió una contraorden de un alto mando de la Presidencia de la República, quien permaneció en el anonimato, para que se ofreciera un trato amable a la prensa de Monterrey.
Todo el equipo, instalaciones y lo principal, la tragazón, debió ser pareja para todos, no sólo para los de Presidencia y la dizque “prensa nacional”.
Como siempre y para no perder la costumbre, la prensa local reactivó el desorden, le entró duro a los lonches y todo volvió a la normalidad.
El Centro Internacional de Negocios (Cintermex) lució como una fortaleza de Sadam Hussein, protegida hasta los cimientos por las fuerzas armadas, pero sólo mientras estaba Calderón y cía.
Por cierto, durante el primer evento con el señor de los Pinos, el dizque representante de los hoteleros, Jesús Nader Marcos, arremetió también contra la prensa.
El empresario regio culpó a los medios de información por la drástica caída del turismo a causa de la rampante violencia generada por el crimen organizado.
“Los medios de comunicación se encargan de decir (a los turistas) no vengas porque este país está en llamas.
“Los medios de comunicación desgraciadamente no se fijan en las cosas buenas, no se fijan en cómo sí ayudar a valorar los éxitos del Ejército, sino a decir cuántos balazos recibió una camioneta allá en Michoacán.
“Y se ponen a contarlos (los balazos) en lugar de resaltar las cosas buenas”, dijo el tal Chuy.
Y luego siguió: “la libertad de expresión es bien válida, pero también hay que concientizar a nuestros medios de comunicación que sean más certeros con su información y que le ayuden realmente al país a promocionarse y a salir adelante”.
Para Mr. Nader Marcos, seguramente las más de 22 mil ejecuciones bajo el sexenio calderonista han sido, en gran parte, por la irresponsabilidad del amarillismo de la prensa mexicana.
CEMEX, UN GALGO CON ALTO SPRINT EN 2010
Don Lorenzo Zambrano Treviño sigue con la adrenalina muy en alto y este 2010 tiene en la mira incursionar en uno de los mercados de mayor crecimiento en el orbe: India.
El presidente de la tercera cementera mundial también se ha fijado como prioridad para este año recuperar la flexibilidad financiera de la tradicional firma regiomontana
“Estamos explorando todo el mundo literalmente”, subrayó el directivo, al reunirse con reporteros, previo a la esperada asamblea anual con accionistas.
Resaltó que “Cemex es una compañía mucho más ágil, mucho más flexible y enfocada al futuro.
“De ser un elefante a dieta, hemos transformado (a Cemex) en un galgo sumamente ágil”, exclamó el hombre que gusta de conducir coches viejos convertibles de colección.
Respecto al gravísimo y creciente problema de inseguridad en todo el país, Don Lorenzo comentó que “claramente no nos gusta lo que ha pasado”.
“Hay que ir a otros países para ver lo que realmente es inseguridad, vayan a Brasil, a Río de Janeiro, en donde al salir del hotel le van a pedir que se quite el reloj, a las señoras que por favor los aretes, collares.
“En otros países hay violencia todo el tiempo, tanto que ya no hay conflictos, ya no es noticia esa violencia.
“Aquí en México todavía es noticia porque es nueva, porque es algo que ha empezado a suceder recientemente.
“Yo en lo personal puedo hablar por muchos de Cemex, nos sentimos mucho más seguros en México que en muchos de los países donde operamos”.
Vaya que Don Lorenzo sabe de lo que habla.
Es un incansable hombre de negocios que se la pasa día con día viajando por todo el mundo para mejorar y elevar la rentabilidad de la centenaria cementera regiomontana.
Y en el rudo juego de las patadas, Mr. Zambrano Treviño puso en claro lo siguiente:
“Lo que puedo decir de Tigres es que Tigres no está en venta, ni se va a vender. Nosotros decimos siempre que van a ganar; pero insisto, para nada, no se vende, los Tigres no se venden”.
Al final dejó a todos los reporteros contentos: hubo nota para la secciones financiera, deportiva y seguridad pública; y todo en tan sólo unos cuantos minutos.
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