
Los Rayados se consolidaron como los mejores del Torneo Bicentenario 2010 y aseguraron jugar en casa toda la Liguilla el partido definitivo, lo que les da una gran ventaja para pensar en conseguir el bicampeonato.
Tras vencer 2-1 al América, el Monterrey llegó a 35 puntos y podría conseguir con sólo empatar ante Morelia en la jornada final de la fase regular, una marca de puntos en la historia de los torneos cortos.
Más allá de las estadísticas, el conjunto albiazul sigue mostrándose como un equipo sólido, que domina a la perfección el esquema táctico de Víctor Manuel Vucetich, independientemente de quien esté en el terreno de juego.
Quien pensó que con la partida de Humberto Suazo el Monterrey se vendría abajo, no sólo se equivocó en el pronóstico, sino que además vio cómo en base a trabajo, a convencimiento y unión este equipo fue mejor que el del torneo anterior y se ve más fuerte para la lucha por el campeonato, el mismo que van a defender a partir de la última semana de abril.
Quizá el único “pero” que hoy le podemos encontrar al superlíder es la cuestión de las lesiones, pues haber participado al mismo tiempo en dos torneos (el local y la Copa Libertadores) ya le está cobrando factura y a la última jornada llega con varios elementos “entre algodones”, y que seguramente no verán acción frente a Morelia para llegar sanos al inicio de los Cuartos de Final.
Aldo de Nigris, Luis Pérez, Neri Cardozo, Walter Ayoví y Miguel Morales presentan lesiones musculares, aunque el caso del atacante regio es el más complicado, pues su molestia en el tobillo derecho no lo deja en paz y podría tener que ir al quirófano, pero se buscará que sea al final de la Liguilla.
¿Quién será su primer rival? ¡Qué importa! El que sea deberá preocuparse por enfrentar el mejor equipo de la liga. De acuerdo a la tabla general tras 16 fechas, faltando todavía la última, se perfila el Atlas como el más viable, el mismo equipo que fue el único que lo ha podido vencer, con un categórico 3-0 en la fecha 2, pero desde esa fecha las cosas cambiaron y hoy hay un mundo de diferencia.
Sin embargo, también podría ser que el América, el Cruz Azul o hasta el Morelia, con una combinación de resultados, sean los posibles rivales en la primera fase de la Fiesta Grande, pero todo quedará definido el domingo 25 a las 18:00 horas.
¿Y los Tigres?
Aunque nadie lo crea, el conjunto felino sigue sumando puntos en la nueva era de Daniel Guzmán. Con la victoria sobre Atlante en Cancún llegaron a 19 unidades, para sacar 10 de 12 desde que El Travieso fue reinstalado en su cargo y además se consolidaron como el mejor visitante de la liga.
A pesar de esto, de los efusivos abrazos del presidente Santiago Martínez con el vicepresidente Héctor González, de las cábalas del mismo Guzmán, hay que ser ecuánimes y no pensar que ya la hicieron, que con esto se van a salvar el próximo año futbolístico, pues para ello tendrán que trabajar en serio a partir de que finalice el torneo el próximo fin de semana.
Una vez que termine el partido ante Pachuca, que será en el Universitario ya con afición en las tribunas, tanto Daniel como su directiva tendrán que ponerse a planear y diseñar lo que será el equipo que no sólo debe pelear por la salvación, sino también por la consolidación del proyecto que iniciaron hace ya casi un año.
Guzmán y Martínez ya tienen en mente lo que van a buscar en el Draft de finales de mayo: Daniel Ludueña, Juan Pablo Rodríguez y Walter Jiménez, además de tres delanteros, dos por los costados y un matón, todos estos en el extranjero.
Se habla ya de la salida de elementos como Lucas Ayala, Fernando Ortiz, Édgar Castillo, Juan Pablo García, Francisco “Kikín” Fonseca, así como Lucas Lobos e Itamar Batista, estos últimos serían usados como monedas de cambio en el mercado de piernas, para conseguir las “armas” que busca El Travieso para la próxima temporada.
Hasta la próxima…