Aunque ha provocado un “harto revuelo” la campaña de despedida, conviene analizar a fondo los mensajes persuasivos que los estrategas del gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, pretenden enviar a los mexicanos aprovechando la permisibilidad legal con motivo de su Quinto Informe.
No obstante, para muchos este protagonismo mediático obedece más que a una salida a una bienvenida buscando confirmarle al respetable que está frente al candidato del PRI al 2012, la realidad es que la estrategia seguida por el equipo del mexiquense, va más derecha que la Carretera Monterrey-Reynosa.
Pero aunque como decía mi abuelita “del plato a la boca se cae la sopa”, todo indica que seguirán apostándole a la “mediocracia”, utilizando favorablemente todos los recursos que les otorga el poder fáctico televisivo y sus resultados comprobados como “kingmakers”.
Vaya pues, ¡la videopolítica en su máxima expresión!
En el spot oficial titulado “Una Manera Diferente de Gobernar”, aparece un periódico con formato tabloide doblado, y aunque está volteado se alcanza a percibir en el encabezado principal: “Desaire a Cald…”, evidenciando la aplicación de lo que muchos expertos consideran como publicidad subliminal.
En este mismo video, aparecen dos tomas en las que Peña Nieto es abrazado y ovacionado por decenas de ciudadanos, pretendiendo mandar el mensaje de una cercanía real con la sociedad.
Todos los videos se realizan en torno a una camioneta oscura circulando sobre una avenida en un atardecer, y llama la atención el hecho de que, aunque viaja como pasajero, el gobernador Peña Nieto no trae puesto el cinturón de seguridad, ¿hablando de legalidad y orden cometiendo una infracción al reglamento y poniendo en riesgo su vida y la de los demás?
En el spot “Mi Primer Compromiso”, aparece el mismo periódico en los segundos inciales, pero en éste ya no se percibe ningún texto, y es precisamente en el segundo 43, que este impreso desaparece del asiento de la camioneta dejando el lugar a un folder color rojo en el que el mexiquense coloca su codo, ¿el PRI de regreso a Los Pinos?
Llama la atención el hecho de que toda la campaña el entorno visual parece flotar en un ambiente de incertidumbre, oscuro y con pocas expectativas ciudadanos por salir adelante, situación que contrasta con el mensaje verbal del gobernador.
“Hoy el mundo y su gente es distinta, y en consecuencia la manera de hacer gobierno tiene que ser diferente. Se gobierna con trabajo, se gobierna resolviendo, se gobierna imaginando, diseñando el futuro, pero lo más importante es gobernar escuchando y asumiendo compromisos y cumpliendo. Cuando llegas y entras en contacto con la gente es ahí donde encuentras la inspiración, la energía para seguir adelante”, es el mensaje clave en los spots.
Demostrando cansancio y en una actitud relajada pero proactiva, con la corbata desabrochada y las mangas de la camisa a medio subir, Peña Nieto parece buscar decir: “Tengo mucha chamba en el Estado de México, pero tengo ganas de hacerlo ahora para México”, ¿será?
Una de las situaciones rescatables pudiera ser que en base a la narrativa utilizada en todos los spots, el gobernador mexiquense realiza una especie de “acto de contricción”, y en un gesto de humildad busca confirmarle a los ciudadanos que, por ser un producto de la nueva generación, está convencido de que los políticos tienen que cambiar.
La gran interrogante es saber si esta narrativa verdaderamente está acorde con lo que los mexicanos quieren “escuchar” y no sólo con los que los políticos “quieren decir”; esta situación, tan cercana pero lejana, es lo que ha hecho que hoy por hoy, los mexicanos no confíen en sus líderes.
¿Usted qué opina?, pero también relevante conviene preguntar, ¿qué opina el líder del Senado, el sonorense Manlio Fabio Beltrones?