Con ausencias notorias de alcaldes metropolitanos electos, reelectos y salientes, el sábado 17 de agosto en el Auditorio Luis Elizondo del ITESM se despidió Luis Donaldo Colosio como edil de Monterrey para ocupar una curul en el Senado de la República.
Un año antes y en el mismo lugar, cuando estaban por comenzar las precampañas rumbo a las elecciones del 2 de junio de 2024, el ambiente fue totalmente de fiesta naranja que nadie se quería perder. Estuvieron todos los invitados… y no faltó nadie.
Entre los pocos de lustre que asistieron -teniendo la excusa de no ir porque Monterrey se perdió de manera apabullante-, estaban Samuel García y su esposa Mariana; el ex secretario del Ayuntamiento, Agustín Basave… ¡y párenle de contar!, en relación a personajes de Movimiento Ciudadano en Nuevo León.
Quizá teniendo la excusa de que eran días de vacaciones, fue notoria la ausencia de Cristina Díaz, alcaldesa de Guadalupe, Andrés Mijes, de Escobedo; César Garza, de Apodaca; Francisco Treviño, de Juárez, David de la Peña, de Santiago, y Miguel Treviño, de San Pedro Garza García.
Vaya, ni Jesús Nava, el edil todavía pintado de color naranja de Santa Catarina, se tomó la molestia de hacer acto de presencia, disculpándose porque tenía otra reunión a esa misma hora.
De los dirigentes de MC solo estaban Miguel Angel Sánchez, del estatal, porque de la cúpula nacional nadie asistió, cuando un año antes estuvo Dante Delgado. Y menos hubo presencia naranja de Jalisco después de que Enrique Alfaro le pintó su raya a Samuel.
Si bien los informes de los presidentes municipales son entre septiembre y octubre, Colosio quiso agradecer a los regiomontanos su confianza en haber votado copiosamente por él en 2021, aunque tres años después MC fue borrado del mapa en la capital.
Hay quienes cargan la derrota a que Colosio quedó a deber en su puesto, a falta de compromiso y capacidad de su gabinete, al golpeteo interno, a la intromisión del gobernador para impedirle su reelección, y a la decisión de Samuel de poner a su esposa de candidata.
Pero faltaba contar la ausencia de la diputada local más naranja que el color de las mandarinas de la zona citrícola,: Sandra Pámanes, quien es la vocera oficial para contestar todas las decisiones “inconstitucionales” que toma la mayoría del PAN/PRI en el Congreso.
Y sobre ese poder, este primero de septiembre iniciará sesiones la próxima legislatura de Nuevo León con la realidad de que ninguno de los partidos o aliados tendrá la mayoría absoluta para hacer y deshacer, pero con una apuesta: ¿cuál será el primer chapulín o chapulina que será tentado por el malito dinero y cambiará de fracción?
Por lo pronto hizo mucho ruido la foto que circuló Samuel muy sonriente con los senadores electos, Waldo Fernández y Judith Díaz, anticipando que MC y MORENA se van a “matrimoniar” los siguientes tres años y que eso podría salvarle el pellejo al gobernador para no ser destituido.
Sin duda que lo mejor está por verse en el Congreso. Y mejor que La casa de los famosos.
Poco, muy poco tiempo duraron las palabras de Samuel que buscará un acercamiento y diálogo con los integrantes de la próxima legislatura estatal para terminar con la parálisis política que se vive en la entidad.
En su cuenta de X el mandatario estatal escribió:
“Una semana para que entre el Nuevo Congreso Local, con quien estoy seguro habrá diálogo y acuerdos para los mejores 3 años de NL. Haré todo en mis manos para que así sea”.
Por supuesto que apenas salió el mensaje, no faltaron los ilusos que celebraron la disposición de García Sepúlveda por terminar con los pleitos con el Poder Legislativo.
Pero ¡oh sorpresa!, los buenos deseos y vibras positivas se fueron al caño el 26 de agosto, cuando los integrantes del Poder Legislativo, haciendo uso de las facultades que les otorgó una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, designaron a Pedro Arce como el nuevo Fiscal de Nuevo León.
Y no solo eso, aprovechando que ya habían agarrado vuelo, los diputados también nombraron a Neyda Nataly Oviedo Guevara, y Laura Perla Córdova Rodríguez, como magistradas del Tribunal Superior de Justicia del Estado, bajo el proceso de insaculación.
Más se tardaron los diputados en levantar el brazo para hacer esas designaciones, que las huestes naranjas del gobernador en salir a decir que la designación del Fiscal era ilegal y que iban a combatirla en tribunales.
En su cuenta de X, el secretario general de gobierno, Javier Navarro aseguró que el gobierno de Samuel combatirá en la Suprema Corte de Justicia de la Nación la designación de Arce como Fiscal General.
Minutos después y por medio de un comunicado, Sandra Pámanes aseguró que la designación “es un fraude a la Constitución Política de Nuevo León hecho por los diputados del PAN y PRI”.
“Hoy nuevamente nos enfrentamos a un gran fraude a nuestra propia Constitución dentro de un proceso completamente amañado, viciado de origen, en el que hemos lamentablemente pasados meses interminables y que hoy ellos buscan culminar con este nombramiento a modo.
“(Pedro Arce) es una persona que ni siquiera reúne los requisitos para ser considerado como titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León”, dijo la legisladora.
Viendo estas actitudes, que persistirán en la próxima legislatura, suena difícil, por no decir imposible que la crisis política que se vive en Nuevo León vaya a tener su fin.
Es aquí donde la bancada de MORENA se volverá muy, pero muy importante, pues ellos serán el fiel de la balanza para decidir a los ganadores de los constantes pleitos que se vivirán entre el PRIAN y Samuel.
Cambiando de aires, muy oportuno fue el usuario de las redes sociales quien rescató del archivo las palabras del entonces diputado local, Samuel García, quien condenaba la existencia de autopistas y carreteras de cuota en Nuevo León.
Este video fue muy oportuno pues salió momentos después de que el ahora gobernador anunció la construcción de un segundo piso en la avenida Constitución que, se supone, aliviará los problemas de tráfico de la zona metropolitana… pero será de paga.
O sea ¿quién los entiende?