
Una muy buena carta de presentación y puntos a su favor los que se anotó el nuevo presidente del Salón de la Fama al no sólo dar a conocer los nombres de los próximos inmortales, sino que a diferencia de otros años, los presentó.
No podía ser de otra manera, ya que el recinto sagrado celebraba sus 37 años de vida, por lo que Mario Morales, su nuevo dirigente, trajo a Armando Reynoso, Alonso Téllez, Gerardo “Polvorita” Sánchez, Derek Bryant y en su representación, al hijo del ampayer Efraín Ibarra, recientemente fallecido.
Creo que es justo darle también un aplauso a Horacio Ibarra, mano derecha, desde hace algunos años, de los directores del nicho sagrado.
Sin estar confirmado, pero conociendo un poco al compañero periodista, le podría asegurar que Ibarra tuvo que ver en gran medida en esta presentación, que para muchos, reúne a una de las generaciones más completas de las que han ingresado, cuando menos en los últimos años.
No necesito darle demasiados números para decirle que Armando Reynoso con sus 12 años en la gran carpa, luego de su paso brillante con los Saraperos de Saltillo, merecía el honor en esta su primera aparición.
Alonso Téllez jugaba con garra, se quedó cerca del mejor beisbol del mundo, pero los que le vimos en acción sabíamos que su consistencia lo llevaría tarde o temprano a este lugar.
Me tocó estar presente el 21 de Abril de 1996, día en que “La Polvorita” rompió el récord de más partidos jugados de manera consecutiva (mil 415) en Nuevo Laredo.
Llegamos esa mañana muy temprano al Parque La Junta y recibimos desde la calle al caballo de hierro mexicano, lo acompañamos hasta el vestidor y con él estuvimos hasta el final de la jornada en donde coronó la noche con un cuadrangular.
Esas imágenes, por supuesto que se las regalamos al jugador, quien ahora lo recordó y confirma que nadie más tiene ese documento histórico.
Derek Bryant fue el más ovacionado, es un hombre muy querido en esta tierra, primero como jugador y luego como el mánager que le dio el bicampeonato del 95-96 a los regios.
Estuvo acompañado de su esposa Betty y su hijo más pequeño David, que no quisieron dejar pasar esa oportunidad y viajaron desde Hermosillo.
Bryant y “La Pólvora” terminaron empatados en la votación por lo que en lugar de ser tres los elegidos, fueron cuatro en esa ocasión, además del ampáyer.
“Se hubiera esperado un rato más”, eran las palabras de Efraín y Julio Ibarra, hijos del famoso “Karateca”, haciendo alusión a la muerte de su padre exactamente un mes atrás.
Fue un momento emotivo cuando el hijo del ampáyer recordó 1994, como el mejor momento en la carrera de su padre, cuando les tocó trabajar como tercia a la familia Ibarra en un Campeonato Mundial Amateur.
Además, Julio les dijo algo que no podía estar más acorde con la filosofía de los hombres de azul.
“Es muy bueno que aprendan a jugar, pero en este deporte no sólo hay que aprender a batear y a fildear, aprendan las reglas para que tengan un mayor conocimiento del juego”.
UN POCO DE TODO
Para cuando usted lea esto ya habrá arrancado la temporada de la Liga Mexicana, y mi pronóstico es que Sultanes se quedará con Mendy López, Chris Roberson, Jasón Childers y Wilton Chávez como sus extranjeros.
Sultanes tiene en sus filas a un jardinero zurdo jovencito de nombre Sebastián Elizalde, recuerde este nombre (es de Guaymas) porque luce para ir a Estados Unidos.
No se vayan, no tardamos en regresar.