
Se ha especulado mucho acerca de los efectos negativos de la multipropiedad en el futbol mexicano. Y ha habido casos comprobados de lo que ha causado en algunos torneos, hace pocos años. Roberto Gómez Junco ha sido un crítico de la misma, torneo tras torneo. Por eso, ha tenido problemas con los que le atacan por llevar a cabo dicha campaña. Principalmente del dueño del Club Pachuca, el todopoderoso Jesús Martínez, quien cedió a su hijo el manejo del Club León.
El ex futbolista profesional y ahora analista y comentaristas de ESPN y Grupo Reforma, también se ha visto acosado por el magnate de Atlas y Santos-Laguna, Alejandro Irarragorri, mandamás de Grupo Orlegi. Esta firma empresarial mexicana, además, tiene bajo su cobijo en España al Club Sporting de Gijón, en la segunda división.
La norma de competencia señala que la multipropiedad no es permitida. Pero en los hechos sí es permitida. Y no pasa nada.
Pero esta vez sí pasó algo muy curioso. Sí. Porque en la noche de la última jornada del torneo, aficionados y jugadores de Club Pachuca encendieron miles de veladoras a Dios, a la Virgen y a todos los santos para que el equipo de Ciudad Juárez ganara al León, a fin de tener liguilla en la Bella Airosa. Por el contrario, a la gente de la ciudad cuerera en el Bajío le valió gorro que el triunfo de la fiera dejara fuera del play-inn a los de Pachuca. La hermandad y la multipropiedad no se tomó en cuenta, con tal de gozar de la fiesta futbolera y seguir alentando la esperanza de acariciar el gallardete, siempre cuando, a final de cuentas, pasara la dura aduana contra Santos-Laguna, después de perder con San Luis.
En este caso los de la multipropiedad no tuvieron para qué lado cantearse. Se quedaron sin alternativa. Pero lo intrincado es cuando dos equipos de un mismo dueño se puedan favorecer, como se ha dado ya en el futbol mexicano, despertando sospechas de un arreglo en el resultado, conocido como “amaño”. Es decir, ahora dos equipos que pertenecen a grupos de multipropiedad, con verdaderos protagonistas en la cancha trabajaron a tope su propia ganancia y ahí tenemos a los de León ocupados en llegar más lejos en la famosa liguilla del futbol mexicano, tras dominar a los de Torreón en un tórrido partido, en busca de vencer este miércoles al poderoso América.
Sin embargo, no hay que dejar de luchar contra la multipropiedad. Porque así lo dicta el reglamento. Y punto. Por eso, Roberto Gómez Junco y otros críticos de la misma, tienen razón en su insistencia al respecto.