
Estamos muy lejos de las elecciones del 2015, donde habremos de elegir en Nuevo León al gobernador del 15-21, a los 51 nuevos alcaldes, renovar el Congreso del Estado y a los 12 diputados federales, pero ya hay muchos aspirantes a distintos cargos.
Algunos de ellos son calificados por los electores como trabajadores, con capacidad y cumplidores de promesas.
Podrían ser candidatos formidables a los puestos de elección popular a los que aspiran dentro de sus partidos políticos, sólo falta que los dejen, que tejan alianzas, que no los descarrilen o que no cometan errores o pierdan piso.
Nuevo León es eminentemente bipartidista, sólo existen el PRI (prinl.org) y el PAN (www.pannl.mx). Dominan el escenario político en el 98 por ciento de los cargos de elección popular.
El resto de los partidos no han conseguido ser atractivos para los electores por múltiples factores que no vamos a discutir ahora, porque los aspirantes que hoy se mueven en la escena y mantienen espacios mediáticos pertenecen a las filas del priismo o al panismo.
Hay mucho tiempo para que nuestros aspirantes pongan en práctica algunos consejos simples y muy útiles en esta sinuosa carrera por el cargo de elección al que suspiran.
¿Nombres? Tan sólo al Gobierno del Estado cuente en la carrera por el PRI a Pedro Pablo Treviño Villarreal, Ildefonso Guajardo, Javier Treviño, César Garza Villarreal, Raymundo Flores Elizondo, Jaime Rodríguez Calderón y la tercia de senadoras, Marcela Guerra, Ivonne Álvarez y Cristina Díaz Salazar, la flamante líder nacional de la CNOP, más el o la candidata del Presidente, Enrique Peña Nieto.
Por el PAN no descarte a Mauricio Fernández, Fernando Elizondo, Fernando Margáin, Margarita Arellanes y hasta a Fernando Larrazábal.
Los mejores consejos sobre comunicación política tienen que ver con la imagen que desean proyectar estos y otros aspirantes a las alcaldías o diputaciones locales y federales.
Por ejemplo, un suspirante no puede aparecer en escena con un semblante adusto o molesto sabiendo que los medios de comunicación están prestos a cazarlo.
¿Qué transmite, qué comunica un suspirante enojado? Todo lo que le hace daño a su imagen ¿Hay momentos para estar molestos? Seguramente sí, pero hay que poner en la balanza qué se dice cuando se está enojado con quién y por qué.
Un pre, pre, pre (2013, 2014, 2015) no debe aparecer en público respondiendo preguntas con el rostro desencajado, malhumorado, somnoliento u ojeroso, porque sólo ahuyentará a sus simpatizantes.
Los que aspiran desde ahora deben cuidar muchos aspectos de su imagen con la finalidad de transmitir seguridad durante los eventos, las conferencias, las presentaciones o discursos que ofrecen a la opinión pública.
Cuidar mucho lo que se dice, no hablar más de la cuenta en temas escabrosos para no exponerse a los cuestionamientos o críticas de sus adversarios son las mejores reglas de conducta comunicacional.
¿Quieren llegar ilesos al 2015? Es conveniente observar mucho, hablar poco y saludar mucho.
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