
Todavía no asume el equipo de Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco” el control del poder ejecutivo de Nuevo León, y ya empezó a medir fuerzas con el poder legislativo.
El haber apoyado el reclamo ciudadano de impedir al Congreso saliente aprobar las cuentas públicas de la administración de Rodrigo Medina de la Cruz, fue un acierto democrático, pero a la vez deja abierto un frente de batalla con la nueva legislatura local.
A partir del 1 de septiembre, el Congreso tendrá 19 diputados del PAN, 16 del PRI como primera minoría, 3 de Movimiento Ciudadano, 2 del Partido Verde emparentado con los priistas, y 1 por el Panal y otro más por el PT.
Los tricolores, derrotados y humillados en las elecciones del 7 de junio, serán sin duda los más belicosos con Rodríguez Calderón y equipo que lo acompañe en el primer gobierno independiente, y sumados a los verdes, bien podrían echar abajo diversas propuestas y proyectos legislativos como el del Presupuesto de Ingresos y Egresos para el 2016, o reformas a la Constitución Política del Estado en materia penal como pretende “El Bronco”.
Baste recordar que para aprobar muchas de las reformas a leyes y códigos, se requiere el voto de la mitad más uno de los integrantes del poder legislativo, y aunque bien podría hacer alianzas el nuevo gobierno con el PAN, sumados los votos de Movimiento Ciudadano, apenas alcanzarían 24, quedando cortos para hacer los cambios que deseen.
Así que o se busca la negociación o existe el riesgo de parálisis en muchas de las acciones que se busca implantar a partir del 4 de octubre, fecha de toma de posesión de Rodríguez Calderón.
A BAILAR CON LA MÁS FEA
Otra papa caliente que le heredará Medina de la Cruz a su sucesor en el Palacio de Cantera será el referente a la revisión de las tarifas del transporte público de pasajeros, las cuales desde diciembre del 2013 no han sufrido ajuste.
De acuerdo a una decisión negociada entre los transportistas con el todavía mandatario estatal, las tarifas de los camiones urbanos, de taxis de alquiler y la malquerida Ecovía, así como las del Metro, no subieron en este 2015 quedando en los niveles de hace dos años, y aún mejor para muchos usuarios, al otorgarse descuentos del 50 y hasta del 100 por ciento en el segundo y tercer transbordo, respectivamente.
Pero ante un entorno económico adverso, con incrementos en las autopartes y otros insumos, los empresarios y las centrales obreras (la eterna CTM que domina el 60 por ciento de las rutas) ya preparan sus argumentos para exigir la revisión y ajustes.
Y no lo dude, se dejarán caer como leones sobre manadas de cebras nomás les den oportunidad para encajar el diente a partir del 1 de enero del 2016.
En noviembre deberá de convocar a revisión la Agencia Estatal del Transporte a los interfectos.
CAMBIOS Y AJUSTES
Con la designación de Manlio Fabio Beltrones como nuevo líder nacional de los priistas, el reacomodo de grupos y posiciones políticas se vendrá en cascada a nivel de los estados, con cambios en las delegaciones federales y los comités estatales del PRI.
Aunque Nuevo León ya no hay proceso electoral en puerta hasta el 2018, la plaza sigue siendo importante, primero, por la intención de los tricolores de resurgir desde sus cenizas y, sobre todo, por tratar de frenar los ímpetus independentistas en la arena electoral.
Cuando menos una veintena de delegaciones federales, entre ellas las correspondientes a SCT, del Trabajo, Desarrollo Social, Gobernación, sin olvidar SER, Economía, entre otras, sufrirán cambios de titulares, y varias de ellas verán el arribo de ex diputados federales o funcionarios afines de Beltrones.
MEJOR CORRIÓ
La decisión de Teresa García de Madero de renunciar al PAN tras tres décadas como militante activa, al perder la elección interna para designar al nuevo presidente estatal, sólo demuestra la debilidad del ala tradicional del albiazul, frente a grupos más poderosos y bien organizados.
La ex embajadora de México en Canadá, con su salida, afirma y confirma la incapacidad de ella y quienes integraron el llamado Grupo San Pedro, frente a intereses más pragmáticos y eficientes como son el grupo San Nicolás que desde hace más de 20 años ha logrado sumar poder, recursos y militantes para así imponer sus reales.
García de Madero acusó que ya no podía hacer nada más por rescatar al PAN de la inercia de corrupción en la que había caído en los últimos años en el estado y a nivel nacional, pero que curiosamente les dio la oportunidad de ganar decenas de alcaldías y gubernaturas, senadurías y diputaciones federales y locales durante dos sexenios panistas, y lo que va del gobierno peñista.
Desplazados del rejuego de poder, marginados los foxistas y calderonistas, los canales, los creeles y zavalas, Tere Madero opta por abandonar el barco y no pelear desde adentro para limpiar el “cochinero y la corrupción”, como sí lo hará el senador Javier Corral, quien pese a que perdió la nominación a la dirigencia nacional frente a Ricardo Anaya, sucesor del pragmático Gustavo Madero, buscará sanear al panismo.
Unos huyen, otros luchan.
Con la renuncia de Marco Heriberto Orozco como secretario general del PAN en Nuevo León, quien se perfilaría para ocupar esa cartera es el actual alcalde de Santa Catarina, Víctor Pérez Díaz.
Orozco fue designado por el edil sampetrino Mauricio Fernández Garza como próximo “city manager”, una figura que no existía y que proviene de Estados Unidos.
Si bien se dice que Orozco era una representante de Pérez Díaz dentro del comité estatal, porque fue secretario del ayuntamiento de Santa Catarina, bien le conviene al actual alcalde agarrarse de una buena vez de ese mecate al aproximarse la entrega de su gestión, de donde puede construir su proyecto político para 2018.
Porque en Santa Catarina se han dado traiciones al más alto nivel. Basta recordar cuando Dionisio Herrera puso a Gabriel Navarro de candidato y, ya sentado en la presidencia municipal, se divorció de él y de Pérez Díaz, quien en ese entonces era primer regidor.
Y ante la cercanía de las elecciones en Tamaulipas el próximo año donde se renovarán alcaldías, diputaciones locales y la gubernatura, seguramente muchos desempleados panistas y priistas de Nuevo León ofrecerán sus servicios a los candidatos.
Eso pasó en 2013 cuando, por citar un ejemplo, Miguel Ángel García, ex alcalde de San Nicolás y ex diputado local, apoyó a un precandidato de Reynosa que en 2016 seguramente será independiente.
Otro albiazul que anduvo en Ciudad Victoria fue precisamente Herrera Duque, coordinado la campaña del entonces candidato a alcalde. Como anduvo Felipe de Jesús Cantú, malogrado candidato a la gubernatura el pasado 7 de junio, quien era el delegado especial del PAN llevando de colaboradores a Fabián Adame y José Luis Carrillo.