El colmo de nuestra política lo confirman los dizque líderes juveniles que regentean el Partido Verde Mexicano, y digo regentean porque no se me ocurre otra forma de explicar cómo pueden existir “opciones” políticas tan incongruentes entre los hechos y los dichos, y para muestra basta un botón:
Pasó el Día del Árbol….pasó el Día de la Tierra… nuestra zona metropolitana arde entre incendios forestales propiciados por la prolongada sequía… sigue pasando la deforestación indiscriminada de los pocos “pulmones” que quedan en nuestra castigada zona boscosa… en fin, pasa de todo tipo de crímenes ecológicos, y ¿los verdes?
¡Confirmando su color!….siguen verdes, pero por ineptos.
¿Los vio en las calles protestando por la ineptitud de las autoridades? ¿Supo de algunas acciones legales para evitar los ecocidios ahora en Semana Santa? ¿Conoció la puesta en marcha de alguna campaña ecológica para recolectar basura?
Vaya hasta en el tema de la inseguridad, ¿ha visto algunas acciones de protesta hacia los magros resultados por las actuales autoridades?, y aunque usted no lo crea, estos santos varones tienen representación política en prácticamente todo el Estado de Nuevo León, desde regidurías, diputaciones locales y federales, etc.
Pero hay cosas en los que verdes son bien buenos: en prometer más que los demás partidos políticos y en hacer excelentes campañas publicitarias, sobre todo anuncios de cine; pero para cumplir nada más no se les da el color. Lamentablemente, lo que prometía ser como una bocanada de oxígeno en el contaminado ambiente político mexicano, ha terminado por ser una gran decepción, propiciada por sus incapaces líderes, al utilizar la “marca” sólo para ofrecerla al “mejor postor”, leáse tricolores, azules o amarillos, ayudándolos a fortalecer sus mezquinas alianzas.
Vaya, fueron “cómplices” del PAN, llevando a Vicente Fox a la Presidencia de México, fueron “cómplices” del PRI en la reciente victoria de Rodrigo Medina en Nuevo León….es decir, en lo que son expertos es en la utilización de la energía eólica, ya que siempre saben utilizar el viento a su favor.
Eso de cambiar México, eso de buscar un México de jóvenes ecolucionarios, eso de pretender mejorar la calidad de vida de los 117 millones de habitantes, simplemente se fue al sanitario de las buenas promesas… y eso sin utilizar siquiera ¡papel reciclado!
¿La Tercera Fuerza Electoral en México?, ¿El Partido Verde sí te cumple? Ja, ja, ja.
¿O a poco usted ya recibió los vales para hacerlos efectivos por medicinas?, ¿o acaso ya le llegaron las mentadas becas escolares?, o la peor de todas las verde-mentiras: ¿SABE DE ALGÚN CRIMINAL QUE HAYA SIDO SENTENCIADO A MUERTE?
Pero el principal problema es que al ser un partido “joven”, sus “jóvenes” dirigentes ya mostraron que conocen todas las tácticas de los auténticos dinosaurios para buscar perpetuarse en el poder, al explotar al máximo su lado amable.
¿En dónde carajos está Jorge Emilio González?, ¿en una pelea patrocinada por Don King, en Las Vegas?, ¿de viaje en un crucero por las islas griegas? Mmmmhhhhh, a la mejor anda en Inglaterra atestiguando ¡la boda de Guillermo con Kate!, o en Italia, comprando reliquias de Juan Pablo Segundo.
No hay duda… debemos aprender a reflexionar nuestros votos… me explico:
El PVEM llegó al Congreso local con dos diputados, sin embargo, a los pocos días de la actual Legislatura uno de ellos se “aburrió” del color y se cambió al PRI, así nada más, lo que conforma la ausencia total de identidad y compromiso ideológico; vaya, haga de cuenta una franquicia electoral, pues.
¿Caras fresas frescas confiables?, la verdad, los mexicanos preferimos a los prietitos con experiencia, porque la ausencia absoluta de experiencia y exceso de ambición económica de estos pelaos nos ha salido más caro a los pagaimpuestos.
Rómulo Elizondo, dirigente de facto del PVEM en Nuevo León, se la pasa viviendo de las canonjías que el “diarreico” sistema político mexicano otorga a los partidos, a pesar de no haber sido formalizado su cargo antes las instancias electorales.
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