Estaba el otro día parqueando mi troca cuando vi los encabezados que hace algunas ediciones manejaron los periódicos El Norte y Milenio Diario de Monterrey y me dije “aijuesúchi…” y me quedé de a seis.
¿Por qué? Pues porque estos medios tan importantes a veces parecen olvidarse de la influencia que tienen en la comunidad -sobre todo en una comunidad que va más seguido a chivear a McAllen de lo que lee un libro- y se dejan caer con su lenguaje.
Para destrozar el idioma ya hay espacios infames y lúgubres como éste donde ahora posan ustedes sus farolitos, mientras que parte de la chamba de las secciones “serias” de los medios debería ser apoyar (coadyuvar, como dicen los políticos) el nivel de cultura de una sociedad. O al menos eso deberían intentar.
Lo digo por el titular que manejó el periodicote de Washington con motivo de una de tantas balaceras (ya saben, la balacera nuestra de cada día) ocurridas en la avenida Eugenio Garza Bala ¡perdón! Eugenio Garza Sada. Pues resulta ser que en El Norte cabecearon: “Apanica tiroteo; acuartelan Tec”.
Y después de indagar con mucha insistencia en los diccionarios de la Real Academia Española (vigésimo segunda edición) y el Diccionario Panhispánico de Dudas ¿qué creen? pues que NO existe la palabra “apanica”.
Dice el venerable texto que el uso correcto es “causa pánico” pero como a los señores editores del periodicote les dio flojera buscar una palabra más adecuada (aterroriza, por ejemplo) o bien se les descuadraba el titular usando una palabra extra, decidieron sacarse de la manga “apanica”.
Una cosa es que tal vez -y lo pongo en duda- la palabra ya sea del uso común en la sociedad y otra que la utilicen de manera tan indiscriminada, porque al hacerlo la fomentan y entonces ¿dónde quedó la labor social, el respeto al idioma? Si a esas vamos pues que se olviden de la ortografía, sintaxis y demás y dejen de hacerle al cuento con sus cursos de estilo ¿no creen?
Ya también les había comentado del afán del periodicote de usar la palabra “alentar” como sinónimo de “volver lento”, cuando el significado correcto de alentar es animar, infundir aliento o esfuerzo, dar vigor.
Bueno, pues apanicado quedé yo con el abuso del lenguaje, y ya me estaba calmando leyendo en el mismo periódico la columna de Miguel Ángel Granados Chapa, éste sí todo un señor de las letras, quien manda un excelente mensaje en cada texto no sólo con el tema de fondo sino con la forma como los escribe, cuando… ¡otra vez la burra al trigo!
Abro La Afición, la sección deportiva de Milenio Diario, y en uno de los llamados de la portada me encuentro con la frase “me cago de risa”, en referencia a la respuesta que dio el futbolista Carlos Salcido sobre el escandalito de su aventurilla con un travesti luego de un partido en Monterrey.
Si ya el jugador (por cierto, chistecillo rápido: ¿en qué se parece Salcido a Salvador Cabañas? ¡en que a los dos les sacaron la pistola en el baño!) la regó con Yamilé y la riega usando ese vocabulario ¿porqué la riega el periódico poniendo ese titular?
Está bien que no suelen ser muy cultos nuestros deportistas pero no olviden que son ejemplos de la juventud y los espacios “serios” de los periódicos también son una influencia importante.
Aquí vale la pena recordar que sí, por un lado esas palabras son expresiones muy cotidianas ¿qué tan válido es ponerlas en la primera plana de un periódico que se supone es familiar? Porque no sé ustedes pero yo pongo el periódico en la sala de mi casa, lo leen mis hijos y los dejo hasta que le echen un ojo a las fotos de Bella Afición, donde salen chicas no tan chicas sino muy bien desarrolladitas.
Peeero de eso a que lean en un llamado eso de “me cago de risa” hay una diferencia notable. ¿Qué le pasó al editor? ¿De plano la entrevista que le hicieron a Salcido estuvo tan mala? ¿El reportero no fue capaz de obtener algo mejor, algo más periodístico que esa declaración? ¿O de plano en La Afición quieren convertirse en el Pepillo Origel de los deportes?
Ya que andamos en el rumbo de Multimedios vale la pena recordar un horror cometido por Armando Moreno, reportero de esa empresa en Gómez Palacios, Durango.
Resulta que en un enlace realizado por el señor Moreno y que pueden consultar en el portal de videos Youtube (http://www.youtube.com/watch?v=Ef41gTz8B5c) habla de las condiciones del tránsito vehicular en el bulevar González de la Vega, y por error o por chistosito, a la palabra Vega le puso una R de más y convirtió tan inocente apellido en sinónimo del órgano reproductor masculino ¿No les digo? dicen que Dios los cría y ellos se juntan.
INCONFORMIDADES EN MILENIO TV
Milenio TV está por llegar a su segundo año de vida, por lo cual aprovecho para enviar mis felicitaciones a todo su personal para que mantengan ese esfuerzo, pues son una opción diferente en la pantalla y aunque tienen segmentos muy malos tienen otros bastante buenos.
Claro, como a mí no me pagan por las felicitaciones sino por los coscorrones, les comparto unos mensajes que me llegaron con motivo del aniversario de este espacio noticioso.
Se quejan los colegas de la redacción en Monterrey del trato de segunda que reciben en comparación a quienes trabajan en la Ciudad de México.
La cita es el viernes 29 de octubre pero ya le avisaron al personal que en el festejo será en el hotel propiedad de mi compadre Pancho (don Francisco González para quienes usan sus autos más de un año), el Fiesta Inn de Plaza Tec.
Les adelantaron que darán de comer una hamburguesa, un refresco y dos cervezas por persona, y no pueden llevar acompañante ya que el presupuesto está limitado.
Si pensamos en la austeridad a lo mejor estaríamos de acuerdo con un festejo tan minimalista pero el asunto es que los empleados de Milenio TV recuerdan el festejo del primer año, cuando se tiró la casa por la ventana y se rentó un lujoso lugar en la colonia Condesa de la Ciudad de México.
Recuerdo que esa vez estuvo la plana mayor de Milenio (Carlos Marín, Ciro Gómez Leyva, mi compadrito Pancho y su hijo Panchito) y personalidades como José Ángel Cordova, Marcelo Ebrard, Enrique Peña Nieto, Santiago Creel, Gustavo A. Madero y por supuesto su servidor.
Esa vez invitaron a los conductores de Monterrey y al resto de la tropa lo dejaron como los chinitos (nomás “milando”) y ni un pastel tuvieron para festejar. Y ahora como la pachanga será en Monterrey se sienten menos porque nomás habrá una triste y melancólica hamburguesa.
Les prometo hablar con mi compadrito a ver si lo convenzo de que no haga menos a la tropa regia, después de todo aquí nació lo que es hoy el Grupo Milenio.
Caray, mínimo que amenicen un espectáculo con Bely y Beto, le bajen la comida a un Das Bier Haus y rifen boletos para el cine o suscripciones de Cablevisión. A ver qué deciden entre mi compadrito y Jorge Lugo, el productor, quien está entre la espada y la pared pues por un lado los dueños le piden que se mida con los gastos y por el otro la tropa le pide un champú de cariño.
El problema que puede surgir es que si la gente no ve con buenos ojos el festejo, simplemente le hagan el vacío y mejor se queden a adelantar la chamba o a ver en qué quedó la telenovela o el capítulo nuevo de Los Simpson o la Teoría del Big Bang.
Como ya agarré vuelo le sigo con los comentarios que me llegan desde la televisora de la colonia Roma, pues dicen que pasa una cosa bastante grave: el pago de horas extras “fantasmas”. A mí la verdad no me consta porque mi sueldo de asesor me lo depositan en Euros y ni me aparezco por las instalaciones pero cuentan que hay más de uno empleado que le pide a otros compañeros que se quedan más tarde que les chequen su tarjeta de salida mientras ellos ya están en sus casitas.
Aquí es tan sencillo como checar con la gente los horarios a los que se van algunos vivillos o bien verificar las cámaras que apuntan hacia los relojes checadores. Está bien que los sueldos están del nabo para muchos pero esa tampoco es forma de compensar los ingresos.
Me cuentan que a muchos les prometieron aumento hace un año y es fecha que no les llega. La cereza en el pastel es que tanto Lugo, en su papel de productor, como Víctor Martínez, como jefe de información, no acaban de hacer sinergia o, dicho en otras palabras, se la pasan del chongo.
Yo no sé si tengan que andar de manita sudada para que la raza vea que se llevan bien pero sí me aseguran que algunas broncas podrían resolverse si ellos dos fueran más empáticos y fueran más parejos a la hora de las llamadas de atención porque resulta que ambos tienen sus consentidos y juran que es obvio para todos.
EL PEPE-GATE: SIGUE
LA MATA DANDO
Me sigo de frente con Multimedios pues ahora resulta que el caso de José Platas (ya conocido como el Pepe-Gate) tuvo un desenlace inesperado: ahí les va lo que me contaron. Y conste que no fue el afectado, porque él muy profesionalmente ha declinado opinar públicamente de la situación.
Resulta ser que los jefes de Platas le piden que se tome unos días de descanso para que piense con cuidado su idea de dejar la reporteada para volverse productor. ¿Se acuerdan que en la edición anterior les conté que esa fue su condición para no renunciar?
Por cierto, no crean que le regalaron los días, sino que le debían muchos descansos como a la mayoría de los reporteros pues como hay pocos no se los respetan y ahí los tienen, incubando crisis nerviosas, gastritis y demás chuladas negativas de la profesión.
Entonces, mientras los jefes lo hacían descansando, me aseguran que Pepe se lanzó a Televisa para ver si había chance pero no hubo y luego fue con Guillermo Franco, de Multimedios, quien decidió darle oportunidad como reportero de producción, para transmitir reportes pagados que no tienen que ver con Noticias.
Le fue muy bien pues me cuentan que el sueldo es mejor y sin la presión de la nota diaria. El guasumara se armó cuando el lunes que debía volver a trabajar va a buscar a Polo Villarreal y se encuentra a Félix Cortés Camarillo, quien es uno de los meros meros y le preguntó que qué hacía ahí, que era un traidor (por haber ido a Televisa) y lo quiso correr, pero Pepe Platas le dijo que no le gritara y la respuesta (conste que se los paso al costo) de Félix fue que él le gritaba y si quería hasta se lo madreaba.
Luego de tan exquisita conversación, Pepe optó por irse a la oficina de su nuevo jefe y olvidarse del mundo de Noticias para concentrarse en su nueva tarea. Hasta ahí va el Pepe-Gate. Ahora resulta que hay un grupo a favor de Pepe y otro en contra. Bueno, si me entero de más se los platico en la otra edición.
Un saludo a Joel Sampayo, quien se lanzó haciendo las calaveras para el equipo de Multimedios. Bien por Sampayo por mantener la tradición, no importa que algunas rimas hayan salido muy forzadas.
Y buen susto que nos dio “El reportero del aire” pues recientemente estuvo internado en una clínica de especialidades del IMSS que está allá por Lincoln.
Cuentan que se sintió mal luego que José de la Luz Lozano, quien es el director de Información en Milenio Monterrey, le quitara la chamba del helicóptero, los reportes viales e incluso los de Telcel. Cabe señalar que al ser patrocinios, todo esto significa lana menos para Joel.
¿Cómo estaría la cosa que -me aseguran- la misma María Julia Lafuente le dijo a José de la Luz que si algo le pasaba a Sampayo iba a ser su responsabilidad? De por sí no se caen muy bien los dos y ahora ¡menos!
Pooor cierto, buena balconeada se dio “La Comadre” Lafuente al agradecer al aire al alcalde de Apodaca, Benito Caballero, por la barbacoa que manda el primer domingo de cada mes.
Cuando dijo eso su co conductor, Fernando Núñez, se quedó muy extrañado y luego de poner su cara de “what?” le dice que a quién le llega esa barbacha (obvio, a él no lo han invitado) y María Julia, pasando aceite, nomás dijo “pues a mucha gente”. Ora que nos pague unos tacos, y que el alcaldazo también mande un kilito por estos lares.
Bueno, va un coscorrón al reportero Raymundo Elizalde, de las noticias, así como a sus editores y conductores porque nadie se dio cuenta, en su nota del viernes previo al Día de Muertos, que dijo que en los altares se colocan “tejotes”, bautizando muy a su manera a los tejocotes, que son esas frutas pequeñas y amarillas medio desconocidas en el norte pero muy populares desde la Ciudad de México hasta la Santa Sede.
Y otro coscorrón para Francisco Paco Cantú, de Multimedios Televisión, así como para sus editores, jefes de información, gerentes de comunicación, conductores y co conductores porque en el caso de la balacera en Los Ramones reportó que había sido un “ataque fantasma” cuando tooodos los medios daban cuenta de la caseta policiaca que quedó como queso gruyere.
Ahí pecaron quienes no mandaron al reportero a confirmar la información y quienes se confiaron al creerle a los policías que reportaron que fue un ataque “fantasma”. Y para colmo, fue hasta las 9 de la mañana cuando corrigieron en el portal la noticia, mientras que en los noticieros se fueron con el horror.
Para despedirme, la pregunta de esta edición:
¿Quiénes son los choferes de prensa de Gobierno que se toman atribuciones que no les corresponden? Se quejan mis colegas porque les dicen dónde deben ir los fotógrafos y dónde los reporteros y cuando vino el presidente Felipe Calderón a inaugurar el hospital de Apodaca la prensa se quería regresar a redactar la nota pero tuvieron que esperar porque estos amigos ¡estaban oyendo el mensaje de Calderón en lugar de tener el transporte listo!
Cualquier información, calavera
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