señora Josefina Vázquez Mota, candidata del PAN a la presidencia de México. Quizá usted todo este tiempo ha sido engañada por quien se ostentó como su coordinador de precampaña en Tamaulipas, un individuo de nombre Francisco García Cabeza de Vaca.
Esta persona fue alcalde de Reynosa entre 2004 y 2007, convirtiéndose en el más corrupto servidor público de que tengan memoria sus habitantes, enlodando los principios y los valores de su partido, Acción Nacional.
Sabrá Dios quién se lo presentó y cuáles fueron las intenciones de quien se lo acercó, pero usted debe saber que en Tamaulipas los apellidos Cabeza de Vaca son sinónimo de mugre y corrupción, pero también de derrotas consecutivas para su partido.
Cuando en 2007 los periódicos Hora Cero y El Mañana de Reynosa mostraron, con pruebas documentales, el agravio que cometió Cabeza de Vaca siendo alcalde, los electores le dieron la espalda al PAN; no volviendo a ganar una elección.
Su coordinador de precampaña en Tamaulipas fue víctima de la ambición, usando la función pública como el camino más rápido para hacerse millonario él, sus dos hermanos y un montón de colaboradores ahora incrustados en su equipo, mismos que promueven el voto para Josefina Vázquez Mota entre la militancia del Estado.
Cabeza de Vaca utilizó y ha manipulado al PAN para su beneficio personal; hace creer que es uno de sus asesores personales, señora Josefina, pero debe saber que su logo cornúpeto azul es sinónimo de putrefacción y derrotas.
Cuando el PAN perdió la alcaldía en 2007 por la pestilente corrupción que imperó en tres años de administración municipal en Reynosa, ha perdido dos elecciones para alcalde, dos para diputados locales, una para legisladores federales y la más reciente para gobernador.
¿Usted cree que si Cabeza de Vaca fuera bien visto en el Estado, como seguro le hace creer a usted y a otros, Acción Nacional no sería el primer partido en Tamaulipas, con alcaldías y mayoría en el Congreso local?
Este sujeto sólo quiere ser senador, colgado de usted, solamente para garantizar la impunidad a través de un fuero.
Reynosa no olvida cómo Cabeza de Vaca, después de sus antecedentes penales en Estados Unidos cuando era adolescente, llegó a ser alcalde para encabezar el capítulo más oscuro de una administración municipal con un PAN que superó la fama del PRI corrupto.
Cabeza de Vaca desprestigia a su partido, señora Josefina; Cabeza de Vaca no es de fiar, como no lo fue en 2006 cuando primero apoyó a Santiago Creel y luego lo traicionó para subirse al vagón de Felipe Calderón.
Es incalculable la fortuna que en tres años, en millones de dólares, amasaron él y sus compinches, la versión actual de Alí Babá y los 40 ladrones, muchos de ellos que se incrustaron después en el gobierno federal que agoniza.
Usted debe de saber, señora Josefina, que la batalla que comenzó en 2007 Hora Cero y El Mañana de Reynosa tuvo sus frutos, porque en estos cinco años ayudamos a que un pelafustán no siguiera ofendiendo a una noble ciudad y a un Estado.
Nuestra línea editorial no está casada con ideologías partidistas, sabemos que en el PAN hay gente buena, noble, honesta y con espíritu de servicio.
Nuestra lucha periodística de 2007 fue para desenmascarar a un vulgar ladrón que estaba como alcalde en funciones, no fue contra su partido. Fue una dura batalla que se ganó y valió la pena combatirla. Y estamos listos para un segundo capítulo.
Está en usted que Cabeza de Vaca siga a su lado, cuando -a decir verdad- desde hace cinco años tuvo que haber entrado a la cárcel.
P.D.- El domingo 5 de febrero sólo el 27 por ciento de los militantes de Reynosa salieron a votar en la elección interna, 10 puntos por debajo de la media estatal. Con ello se demostró que Cabeza de Vaca vende espejitos a la ahora candidata a la presidencia, pues los mismos panistas ya no le hacen caso. Lo vomitan. v
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