Cuando en Hora Cero Encuestas decidimos que era momento de hacer un trabajo estadístico sobre la realidad de los medios tradicionales de comunicación frente a la moda de las redes sociales y las páginas de Internet, sabíamos que podíamos incomodar a las cabezas de los dos grandes imperios de Nuevo León.
A Francisco A. González Sánchez, presidente del Grupo Multimedios, y a Alejandro Junco de la Vega, presidente y director general del Grupo Reforma. Y también a sus descendientes que tomaron las riendas de cada consorcio.
Pero no solamente a Multimedios, Reforma, TV Azteca y Televisa Monterrey, sino a nosotros mismos, porque desde hace casi 19 años (febrero de 1998) Hora Cero inició como una empresa dedicada a los medios impresos sin pensar que un día se desplomaría la credibilidad de la prensa tradicional: prensa, radio y televisión.
Si bien a nivel mundial ofertas informativas gratuitas como Hora Cero, Metro y otros no están consideradas como prensa tradicional, hay una realidad que no se puede esconder: los lectores, televidentes y radioescuchas prefieren estar enterados a través de un móvil, una computadora o una tableta, desairando al papel.
El mundo ya es diferente y las redes sociales, sobre todo, se han convertido en el instrumento mas inmediato para obtener y compartir información sin necedad de ir a un puesto de venta a comprar un periódico, llegar a casa y esperar a que empiece el noticiero estelar, o sintonizar la radio.
Los resultados obtenidos por Hora Cero Encuestas son contundentes: en Nuevo León la televisión (34.8%) ya no es tan creíble como lo fue por décadas. Juntas las redes sociales (34.1%) y las páginas de Internet (9.4%) superan a las televisoras de Nuevo León.
En ese mismo rubro sobre credibilidad aparecen la prensa escrita (12.7%) y la radio (8.4%). Este último medio, según se puede ver en las gráficas que se presentan en esta edición, ocupa la última posición.
En otra pregunta de la encuesta se reflejó que el público prefiere las redes sociales (41.9%) y la páginas de Internet (10.3%) para expresar opiniones o quejas, por 31.4 por ciento de la televisión, 8.4 de la prensa escrita y 7.7 por ciento de la radio.
Aunque hace años se pudo pensar que nunca sucedería, en el Nuevo León actual cada vez menos personas recurren a los medios electrónicos para compartir una opinión, igual el cartero llega menos a los periódicos con una valija llena de quejas.
Los usuarios de redes sociales tienen al alcance otras plataformas para desahogarse, opinar o debatir con el resto de los usuarios sobre temas de interés, dando la espalda a los medios tradicionales de comunicación.
Análisis para otra ocasión es que no todo lo que se publica en Facebook o Twitter puede tomarse como verdad, porque los textos, documentos, audios, videos o fotografías no pasan por filtros o pruebas de veracidad siendo fácilmente manipulados o falseados.
Volviendo al tema, en otra pregunta de la encuesta sobre si en Nuevo León los periodistas son líderes y forman opinión, los porcentajes obtenidos son contundentes: el 37.6 por ciento opinó que manipulan al público o “están vendidos”; y el 24.2 no forman opinión, es decir, el 61.8 por ciento se manifestó de manera negativa.
Apenas un 31 por ciento externó una respuesta favorable, siendo dos conductores de noticieros de Multimedios: el arquitecto Héctor Benavides y María Julia Lafuente, los mas favorecidos de manera espontánea.
Reveladora también fue la respuesta de que los neoloneses (con 46.8%) están mas conectados con sus móviles a las redes sociales durante el día, por 51.9 por ciento que sigue usando el teléfono para lo que fue inventado: hablar.
La realidad que viven los medios tradicionales de comunicación de Nuevo León, de México y del mundo y que preocupa a los propietarios los ha llevado a tomar decisiones que jamás imaginaron aplicar en cuanto a reducir sus nóminas y desaparecer productos.
Y algo que difícilmente podrá recuperar la prensa tradicional es la credibilidad perdida, no solamente por la aparición de las nuevas tecnologías… sino por errores propios. v