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staba El Apuntador haciendo de nuevo su maleta para irse de fin de semana largo a su penthouse en Playa del Carmen aprovechando el segundo puente de marzo (porque el viernes 25 sus “bendis” no irán a clases), cuando se enteró de las ridiculeces de la comadre María Julia “Sinfuente” en Telediario.
Y no estamos hablando de sus “saludos orondos” o el “¿ya comió compañero?” que no son más que burdas maneras de cobrar (y bien cobrado) por las menciones en el noticiero, sino cómo se quiere convertir en una especie de comediante cada vez que hay un Clásico Regiomontano.
Ya se sabe que cada vez que hay uno de estos partidos el auditorio del Telediario puede esperar un sketch cómico-mágico-musical entre ella y su patiño Luis Carlos Ortiz, quienes como creen que a la gente les hace mucha gracia sus payasadas, cada vez intentan superar la anterior.
Esta vez no fue la excepción y “Sinfuente” decidió que iba a ser muy chistoso subirse a una monster truck, como se le llama a esas pick ups de llantas enormes y literalmente pasarle por encima a un carro que, supuestamente, era propiedad de Ortiz.
Por supuesto que el carro no era del patiño de “Sinfuente” y la conductora no pagó por el vehículo que destrozó, para eso logró el patrocinio de una empresa de grúas y garages.
Pero no conforme con esta “proeza”, el teleauditorio de Multimedios tuvo que sangrar de los oídos luego de escuchar la “interpretación” (hay que llamarlo de alguna forma) que “Sinfuente” hizo de un tema dedicado a los Tigres donde ¡hasta le prestaron el estadio Universitario!
Como lo leen, queridos lectores, alguien en Sinergia Deportiva y la UANL pensó que era una buena idea soltarle a María Julia la cancha del “Volcán” para que grabara su “videoclip”.
Es gracioso ver cómo cuando se trata de competencias deportivas, entrevistas o algún otro evento, los responsables del inmueble son muy celosos para prestarlo y cuantimás si van a pisar la sagrada cancha… a menos que te llames María Julia y quieras echar de gritos para un espacio en el Telediario.
En fin, la hipotenusa, como dicen los chavos de hoy.
Pero si usted estimado lector de este espacio tan amado como tan odiado pensaba que era todo con María Julia, pues fíjese que no. Resulta que el jueves 17 la conductora se atrevió a ofender a uno de los abogados de Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”.
¿Quién le dio permiso o autorización a la señora para llamar “pelón” al licenciado Gabriel García al aire, en vivo y todo color solo porque tiene calvicie prematura?
¿Qué la dama no aprendió a cerrarse con un zíper la bocata luego de aquella vez cuando ofendió con sus “manos prietas” a los televidentes tez morena sólo porque no son de raza aria de la colonia Independencia como ella?
María Julia se siente intocable por parte de sus patrones de Multimedios que le festejan todo, hasta sus ruidos cuando va al baño, por sus elevados niveles de audiencia, y por eso mismo se siente con el derecho de insultar a quien se le pegue la gana.
Pero que nadie se atreva a resaltar los estragos físicos que luce en la pantalla en el Telediario de mediodía que, por cierto, no hay maquillaje mágico que los esconda, muy normales por su avanzada edad, porque inmediatamente se tomaría como violencia contra las mujeres.
Por eso mismo, El Apuntador se reserva ciertos calificativos tan agravantes como decirle “pelón” a una persona que ni la debe ni la teme. Quizá lo que provocó su enojo es que el abogado no dio las declaraciones que ella quería ante los medios cuando llevaron a “El Bronco” al Cereso de Apodaca.
“Sus jefes no le dicen nada a María Julia; sus productores están sometidos por ella, y el público le festeja todo. Es el caso de un comunicador que está más allá del bien y del mal. Ya no se sabe si Telediario es un noticiero, una parodia o aquel programa de Codazos, pero ya llegó a un nivel de intocabilidad que no tiene límites.
“Si no hay nadie que le ponga un alto y le diga ‘¡así no!’ Y al contrario, le celebran todo, pasará como una niña chiflada al aire, como las niñas que no tienen límites”, opinó experimentada conductora de un canal de televisión de Monterrey que prefirió omitir su nombre para no echarse, como se dice: “Esa tarántula al cuello”.
VISITA DISTINGUIDA
En temas más agradables, en la reciente doble visita a Monterrey de la reconocida periodista mexicana Valentina Alazraki, la “corresponsal de corresponsales que ustedes conocen, y conocen muy bien”, como la calificó Joaquín López-Dóriga cuando estaba en Televisa, hubo de todo, pero en el gremio hubo un encuentro que conmovió a la misma visitante.
Cuando salió del despacho de la presidencia municipal en su encuentro privado con Luis Donaldo Colosio, alcalde de Monterrey, Valentina mencionó que se emocionó cuando una joven se le acercó para tomarse una foto y le dijo que por ella había estudiado periodismo.
Esa persona es Maleny Contreras Castillo, ex reportera de Núcleo Radio Monterrey y que actualmente trabaja en la dirección de comunicación social a cargo de Andrés Bichara. Textualmente publicó lo siguiente en su perfil de Facebook acompañado de foto con Valentina:
“No puedo explicar la emoción que sentí hoy. Poca gente sabe la gran admiración que siento por esta mujer. Ella es mi top del periodismo desde niña; por ella es que elegí mi carrera y profesión.
“Hoy estreché su mano y le dije: ‘Usted me inspiro a estudiar periodismo’. No pude decir más. Si se lo hubiera contado a Maleny de 7 años no me lo hubiera creído. Gracias Valentina Alazraki”.
Horas antes, en la Universidad Autónoma de Nuevo León, donde dio una charla por el Día Internacional de la Mujer, hubo otros reporteros que no desaprovecharon la ocasión para tomarse una selfie o pedir una foto con Valentina, la decana de los corresponsales en El Vaticano, entre ellos Ricardo “Richy” Alanís, ex Milenio.
Quien también acudió a tomarse un café en el hotel donde se hospedó fue Roberto Silva, exdirector de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UANL, quien estuvo acompañado de su esposa. Ambos mantienen una amistad con la periodista y se ven cuando viene de Italia.
Cuando Valentina terminó la conferencia en la Biblioteca Magna el martes 8, el rector Santos Guzmán le ofreció una comida en un restaurante de Morones Prieto, a donde también acudió Jorge Cisneros, director de comunicación social de la Máxima Casa de Estudios, quien horas después fue anfitrión de una cena privada.
Quienes brillaron por su ausencia para saludar personalmente e invitar a la visitante a un recorrido por la FCC -o asistieron con bastante bajo perfil a la charla en la Magna, ¿por alguna extraña razón?-, fueron Moncerrat Arango y Margarita Emilia González, las mandamases en esa institución.
Fue extraña la decisión de ambas, porque años atrás Silva nombró a Valentina como consejera honoraria con el palomazo del entonces rector, Juan Antonio “El Tigre Toño” González, obviamente por ser una figura del periodismo en México y esa carrera ha sido el estandarte de la FCC.
Sin embargo, aclarando que este columnista no está para saberlo, mucho menos para andarlo divulgando, en la comida del rector en El Mirador se dejó claro que pronto, más pronto de lo que canta un perico, se tomarán decisiones para iniciar el proceso del nuevo director o directora.
RETAZOS
Este columnista se pregunta: ¿qué jabón patrocina al conductor (no periodista, aclarando) Víctor Martínez, de Multimedios, para no solamente tirarse de la tercera cuerda contra “El Bronco” en uno de sus editoriales, sino burlarse en sus redes sociales?
Porque al menos de que durante el sexenio del ex gobernador las finanzas personales de Martínez hayan sido afectadas, no se explica por qué subió a su Facebook una foto tomándose un caballito de Tequila Bronco con la frase burlona: “A su salud”, sosteniendo una revista titulada “El último rey”.
¿Qué mosco le picó al conductor de la empresa propiedad de Francisco “don Pancho” González, para asumir esa postura de muy ofendido por Jaime Rodríguez Calderón? Cierto, el ahora encarcelado redujo drásticamente la publicidad a Multimedios en los primeros cuatro años.
Cuando “El Bronco” llegó a la gubernatura en 2015 se dio cuenta que algunas empresas le pagaban a sus empleados teniéndolos en nóminas negras del gobierno estatal anterior. Sólo así se explicaría la postura de Martínez.
Pasando a otros temas el columnista da trámite al reclamo, advertencia y/o denuncia del subdirector editorial de Hora Cero, Gerardo Ramos Minor, quien ofreció un servicio a la comunidad dirigido especialmente para los automovilistas y motociclistas que circulan por las calles de Monterrey:
Resulta que, si llegan a tener la mala fortuna de toparse el auto Nissan Tsuru con el número económico 58 del periódico ABC, mismo que en esta ocasión era conducido por Fabricio Gallegos, tengan mucho, pero mucho cuidado, pues este compañero es un verdadero cafre y homicida en potencia.
Ahí tienen que a eso de las 9:40 horas del pasado martes 15 de marzo, Gerardo, el cual desde hace años decidió movilizarse en motocicleta, tuvo la mala fortuna de toparse con Fabricio quien, seguramente, iba tarde para llegar a la conferencia de prensa del Nuevo León Informa que se lleva a cabo en el Palacio de Gobierno.
El problema no es que el angelito fuera tarde a su trabajo, el mello del asunto es que iba manejando a una velocidad inmoderada que provocó que casi se llevara de corbata a Gerardo y su moto en la curva que comunica la calle Zaragoza con Zuazua ahí, frente al Palacio Municipal.
Afortunadamente Gerardo alcanzó a darse cuenta del exceso de velocidad del hoy conocido como “el Toreto región 4 del ABC” y pudo hacerse a un lado, de lo contrario ahorita todavía lo estarían despegando de la parrilla del Tsuru del periódico propiedad de la familia Estrada.
Y antes de que alguien diga que Gerardo tuvo la culpa pues iba manejando como viejita, quienes conocen esta zona saben que no solamente es una curva que se tiene que tomar a una velocidad moderada, sino que también hay que hacerlo, pues a 10 metros hay un paso peatonal.
Cambiando de canal y aunque pareciera que por alguna extraña razón mencionar esto es políticamente incorrecto, el columnista desea enviar un saludo y toda su solidaridad para los compañeros y compañeras de los medios de comunicación que fueron agredidos (así, con todas sus letras), por integrantes de los colectivos feministas que participaron en la pasada marcha del 8M.
Entre ellos una camarógrafa y reportera de Televisa Monterrey, empresa que no solo cumplió con el capricho de las organizadoras del evento de no enviar hombres a cubrir la marcha (ahora resulta que estos grupos le van a poner las órdenes de trabajo a los medios de comunicación), sino que vieron como aún y con eso, sus representantes fueron atacadas por algunas de las participantes en la marcha.
El problema vino cuando las compañeras de Televisa se dieron cuenta que había personas cometiendo actos vandálicos y cuando quisieron captarlo en video, fueron agredidas.
Otro que también corrieron de la marcha, fue al corresponsal de la revista Proceso, Luciano Campos, a quien ya agarraron de su puerquito estos colectivos, pues en la pasada marcha también le exigieron que se fuera del lugar.
Es curioso como estas agresiones pasaron desapercibidas entre los compañeros quienes, incluso, en algunos casos llegan hasta justificarlas asegurando que es lo normal que tienen que soportar los reporteros.
Es cierto, nadie intenta minimizar la lucha de las mujeres y el enojo que sienten por la violencia por su contra, pero ninguna agresión en contra de un representante de la prensa puede ser tolerada y mucho menos justificada.
Los violentos (o en este caso violentas) tienen que ser señaladas, no importa que estén protestando para encontrar justicia.
No se puede andar por la vida exigiendo el bien cometiendo el mal.
Antes de cerrar el espacio va una felicitación para el experimentado compañero de Hora Cero Deportes, César Vargas, quien tuvo una destacada participación en el homenaje póstumo que la Universidad Autónoma de Nuevo León, a través de la Facultad de Organización Deportiva, organizó a Tomás “el Jefe” Boy.
César participó en un panel de comunicadores que hablaron sobre el legado de Boy junto a Pedro Piña, de Televisa Monterrey; Juan Manuel García, conductor de La Peña Futbolística, y Gabriela Batocletti, hija del mítico jugador de Tigres y comentarista deportiva.
Y ahora sí va la gustada pregunta de la quincena: ¿cuándo será el día cuando María Julia “Sinfuente” dejará de hacer tanto daño cerebral a los televidentes que la siguen?
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