
Por Delia Ramírez
Inicia el 2025 con mucho ánimo para quienes dan seguimiento a la temporada de premios a lo mejor del cine. Es uno de los momentos más esperados y comentados tanto por fanáticos como por los críticos, centrándose en los que reconocen lo más destacado que la industria presentó en el último año.
El 5 de enero inició con la entrega de los Golden Globe, la cual funciona como un espacio para medir y estar en sintonía con lo que podremos encontrar para los Oscar 2025. En las categorías de cine, las ganadoras fueron “The Brutalist” y “Emilia Pérez”, mientras que “Shōgun” logró triunfar en la categoría de T.V. (series). Y por supuesto Demi Moore logró alzar la estatuilla gracias a “The Substance” como Mejor Actriz, y en Mejor Película Animada “Flow” logró la consagración, superando a “Intensamente 2” y/o a Disney Pixar. Hasta aquí, vamos bien.
Esto sería o debería ser la nota principal, sin embargo, una situación inesperada ha sacudido al mundo y en particular a Los Ángeles, California, conocida como la capital mundial del cine, ya que alberga a Hollywood, un distrito que se ha convertido en sinónimo de la producción de películas, entretenimiento y cultura cinematográfica.
Las imágenes que nos presentan en las noticias, videos en YouTube, “reels” de redes sociales y demás, han causado alto impacto, recordando que no es la primera vez que esto ocurre en dicha ciudad, solo que en esta ocasión la metrópoli literal “arde” y los incendios sin precedentes se han extendido de manera tan rápida, que ha causado el caos y desorden, digno de las películas que se producen en dicha ciudad.
En esta zona del mundo viven muchas celebridades y famosos de Hollywood quienes han perdido todo. De igual forma viven trabajadores que también forman parte de esta industria y se nos pasan por alto: escritores, productores, personal administrativo, personal de servicios y muchos más, que de por sí han tenido años complicados en lo laboral después de la pandemia del COVID-19.
Como consecuencia de este desastre natural (otros dicen que no es natural, pero es tema para otra conversación), las ceremonias programadas con antelación han sido reprogramadas y el más sonado es el aplazamiento de los nominados al Premio Oscar, el cual tenía fecha para el 17 de enero y al momento de escribir esta columna, la nueva fecha sería el 23 de enero. Así que conforme avanzan las horas, tenemos en espera lo que ocurrirá con el destino de Critics Choice Awards, los Premios BAFTA, Premios del Sindicato de Actores (SAG) así como los Independent Spirit Awards.
Se dice a través de medios especializados, que los organizadores de los Premios Oscar estaban en conversaciones para posponerlos o para modificar el tono, pensando en convertirla en una gala benéfica para recaudar fondos contra los incendios. La cancelación total de dichos eventos se convertiría en exigencia de una muestra de solidaridad por parte de la industria. Nadie está exento de las fuerzas de la naturaleza.
Así que desde aquí esperamos que los incendios pronto puedan ser extinguidos, ya que el proceso de recuperación y evaluación es crucial para garantizar la seguridad, restaurar el área afectada y prevenir futuros incidentes. Los Ángeles no solo es un lugar de rodaje y producción, sino que es un símbolo cultural de la industria del cine, con una historia rica y una influencia global que sigue siendo fuerte hasta el día de hoy.
@soydeliaramirez