
Con el tiempo encima y la legislación electoral en contra, los partidos políticos de reciente creación mejor conocidos como la “minichiquillada” -por aquello del tamaño de su militancia-, empezaron a ofertar, perdón, a abrir a la ciudadanía el registro de sus precandidaturas a alcaldías, diputaciones locales, federales y de gobernador de Nuevo León.
Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el partido creado bajo la sombra de Andrés Manuel López Obrador y que en a nivel estatal dirige Rogelio González Ramírez; el Partido Humanista, con Jesús Gerardo López Macías como líder, y el PES o Partido Encuentro Social, con Esteban Tello Romero como su pastor, están en busca de talentos y valientes que deseen encabezar las listas de sus postulados.
Y aunque cuentan con una militancia obligatoria de 3 mil 500 afiliados, pues no les caería nada más que líderes de opinión, académicos o políticos resentidos de otros partidos, sean sus abanderados en los comicios del 7 de junio de 2015.
Las reformas electorales y el hecho de ser su primera elección, la llamada prueba de ácido para ver si obtienen el 1.5 por ciento de la votación total para poder mantener el registro electoral, les impide a estos noveles partidos hacer alianzas o coaliciones con otras fuerzas políticas.
Por ese motivo la “minichiquillada” estará en desventaja frente a posibles mancuernas, digamos de la talla de PRI-PVEM-Fuerzas Ciudadana, como ya ocurrió del PAN o PANAL que se irán solos, o una potencial unión del PRD-PT.
“THE WALKING DEAD” DE LA POLÍTICA
Nombres como el de Adalberto Madero Quiroga o Abel Guerra Garza, quienes por cierto protagonizaron en el 2006 aquella disputa por la alcaldía de Monterrey, parece que se verán las caras en el 2015, pero en otro escenario: el municipio de Escobedo.
En esos comicios no se olvida cuando el priista salió con su camiseta puesta en la que lucía el letrero “Ganamos”, apenas y cerradas las casillas de votación, mientras el panista titubeante afirmaba que el triunfo era suyo.
El ex senador Madero, quien fue expulsado del PAN por la Comisión de Honor y Justicia del CEN acusado de malos manejos y perjudicar la imagen del panismo por su errático desempeño, volvió a ingresar por órdenes del Tribunal Federal Electoral.
Esta vez pretende ser tomado en cuenta como candidato a gobernador, aunque su plan B es ser postulado a la alcaldía de Escobedo, dominio político del actual diputado federal Guerra Garza desde hace más de 15 años.
El ex secretario estatal de Desarrollo Urbano, también dos veces alcalde de Escobedo, aún no ha dicho qué papel jugará en las elecciones del próximo junio, aunque tampoco se descarta que se haga a un lado en sus pretensiones por ser alcalde y apoye a su esposa Clara Luz Flores.
Sería pues un enfrentamiento de antología entre Madedito, como se le conoce popularmente al panista, y la ex alcaldesa, porque su marido no permitirá que Madero vuelva a derrotarlo, sin él en las boletas electorales, sino la señora de Guerra.
Dicen en los ya pocos desayunaderos y cafés donde se reúnen los políticos y burócratas estatales afiliados al PRI, que con fecha límite el 6 de diciembre se dará el brincadero de funcionarios del gabinete estatal en pos de una precandidatura a cargo público, dejando cuando menos media docena de despachos vacantes en el Palacio de Cantera.
Vuelven a insistir en que Juana Aurora Cavazos y Álvaro Ibarra, secretarios de Educación y de Gobierno, respectivamente, son los que se van para diputaciones federales, lo que podría significar el arribo de otros funcionarios a sus cargos, toda vez de que también Federico Vargas, titular de Desarrollo Social, será otro que buscará una nominación.
Lo interesante del caso es que Jorge Domene, súper funcionario estatal, suena para ocupar la Secretaría General de Gobierno, lo que si bien es un ascenso en el escalafón estatal, en cuanto a responsabilidades, sería un retroceso ya que ahora el también vocero de seguridad en el gobierno de Rodrigo Medina de La Cruz, hace más chamba que la desempeñada por Ibarra.
En su breve paso por Monterrey para asistir al quinto informe de gobierno del ejecutivo estatal, el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Juan Díaz de la Torre, aprovechó para tirar línea directa a los líderes de las secciones 21 y 50 del magisterio, así como del Panal, Juan Antonio Rodríguez González.
Una de las directrices es de que en las elecciones del 2015, Nueva Alianza no hará coaliciones con otras fuerzas políticas en la entidad, así que se rascaran con sus propias uñas y candidatos.
La otra es que al cumplirse en febrero próximo dos años del arresto de Elba Esther Gordillo Morales, se evite en lo posible una división entre las fuerzas sindicales al ser potencialmente viable su liberación por falta de pruebas.
Es decir, el actual dirigente quiere seguir en el cargo y evitar el retorno de la llamada líder moral del magisterio. Quien con leche se quema, hasta al jocoque le sopla….
En su comparecencia ante el Congreso del Estado para rendir cuentas por sus cinco años al frente de la administración estatal, los legisladores de la oposición PAN, PRD y PT se aventaron de la tercera cuerda para, según ellos, decirle sus verdades a Medina de la Cruz.
“Este sexenio ha significado para Nuevo León, deuda, irregularidad, pobreza, opacidad, represión y despilfarro”, indicó el legislador panista Enrique Barrios, por cierto, muy bien posicionado entre los simpatizantes de su organismo político para aspirar a la alcaldía de Monterrey o a una curul en el Congreso de la Unión.
Se refirió a “una deuda descomunal” que se incrementó de 17 mil 900 millones de pesos a 60 mil millones de pesos y que las próximas administraciones tendrán que pagar en más de 50 años. Y cuestionó: ¿en realidad estamos mejor que nunca?
Eduardo Arguijo Baldenegro, coordinador de la fracción perrredista, expresó: “Ha llegado el momento de que se den cuentas claras, de asumir de cara al pueblo las equivocaciones de su gobierno, y de corregirlas si tiene voluntad política, antes de que termine su mandato y pase a la historia como un gobierno que hizo de la impunidad, la corrupción y el abuso del poder un mal hábito que no fue combatido con oportunidad”.
Cuando Medina de la Cruz iba a empezar su discurso, la panista Blanca Lilia Sandoval se levantó de su asiento y le dio la espalda, siendo apoyada por las también legisladoras de su bancada, Rebeca Clouthier y Carolina Garza.
Afuera del recinto los guardias de seguridad impidieron a un empleado de Metrorrey, Agapito Castro, desplegar una manta. Cabe recordar que estuvo en huelga de hambre denunciando abusos contra su persona en ese organismo estatal.
Y quien sigue metido en un hoyo negro es el alcalde de Guadalupe, César Garza Villarreal, quien si quiere dar señales de transparencia y tener la mano dura, deberá ordenar el cese de funcionarios de su gestión que han permitido que se otorguen contratos millonarios a empresas con prestanombres, como lo ha evidenciado Hora Cero.
Porque a todas luces esta práctica viola las leyes y reglamentos de Adquisiciones, que a la letra se refiere a sanciones a compañías que tengan acceso al erario incurriendo en falsedades, como la compañía Concierge and Manintenance Services S.A. de C.V., que ha recibido contratos y cheques por más de 10 millones de pesos.
Pero resulta que esa razón social tiene un verdadero dueño que responde como Omar Cano Niño, no una persona de oficio velador de nombre Ricardo Contreras Niño, al parecer primos. Este último aparece como socio mayoritario, según el acta constitutiva notariada publicada en este medio en pasadas ediciones.
Como también lo confirmaron el comisario de la empresa, Gerardo Bazaldúa, y el papá de Contreras Niño, quien en entrevista grabada rechazó que su hijo sea el dueño.
¡Vaya broncón en que sigue el alcalde Garza Villarreal!, poniendo en riesgo la alcaldía de Guadalupe en las próximas elecciones. En un municipio de alternancias y vomita a los partidos cuando sus alcaldes incurren en estas prácticas corruptas.