Manuel Acuña, ex director de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Nuevo León, desayunaba muy sonriente el martes 23 de junio en el restaurante Gran Pastor de avenida Gonzalitos. Con saco en brazo se despedía de dos personas bien vestidas cerca de las 9:30 horas.
Obligado a renunciar a su cargo por abiertamente apoyar a la ex candidata del PRI a la gubernatura del Estado, Acuña fue sacado de la jugada sucesoria para la rectoría de la Máxima Casa de Estudios.
Por ordenar el acarreo de estudiantes, prometerles acreditar exámenes y becas, así como ofrecerles apoyos mensuales por 6 mil pesos a cambio de apoyar Ivonne Álvarez García en la campaña, el que se sintió sucesor del doctor Jesús Áncer Rodríguez salió de la Facultad como tapón de sidra.
De nada le valió a Acuña su amistad, casi compadrazgo, con el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, y con otros funcionarios del gobierno federal.
De esa manera se refuerzan las apuraciones de Rogelio Garza Rivera, secretario general de la UANL, quien con el apodo de “El Ranchero” encajaría en el perfil de colaboradores del futuro gobernador del Estado, Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”.
Con la dupla ‘El Bronco’ y ‘El Ranchero’, la Universidad pudiera sufrir una fuerte sacudida y liberarla del Partido Revolucionario Institucional, pues durante décadas estuvo sometida a los caprichos del gobernador en turno tricolor, salvo cuando el PAN gobernó entre 1997 y 2003.
Garza Rivera, ex director de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME), cumplió con la máxima de don Fidel Velázquez: “quien se mueva no sale en la foto”, siendo muy cuidadoso los últimos dos años y apegarse a que “calladito se veía más bonito”.
Seguramente las aspiraciones del actual secretario general de la UANL de suceder a Áncer Rodríguez, fue tema en el desayuno que tuvo Rodríguez Calderón con el ex rector José Antonio “El Tigre Toño” González, días posteriores a las elecciones del 7 de junio.
“Debe haber vergüenza del director y renunciar, porque cometió un error”, declaró el futuro ejecutivo estatal cuando se destapó la cloaca sobre el activo proselitismo de Acuña a favor del PRI y de su candidata.
Y sobre el mismo tema, “El Bronco” dijo en entrevista con Hora Cero que durante su mandato terminará con las mafias y la corrupción dentro de la Máxima Casa de Estudios.
Dijo que respetará la autonomía universitaria, además de que pedirá a maestros y empleados universitarios que actualmente trabajan en la UANL y en el gobierno, que se decidan por una opción para adelgazar la nómina estatal.
Por cierto, si había dudas de que ex colaboradores del gobernador Rodrigo Medina de la Cruz operaron en contra del PRI y afectaron seriamente a Álvarez García, la mejor prueba fue la reunión de “El Bronco” con “El Tigre Toño”.
Despedido del gabinete estatal por Medina de la Cruz tras apoyar las aspiraciones de la senadora Cristina Díaz Salazar, el también ex secretario de Educación y de Desarrollo Económico tuvo una activa participación para reclutar apoyos entre la sociedad civil a favor del candidato independiente.
Pero “El Tigre Toño” no fue el único agraviado por el gobernador y que se fueron al bando contrario. Otros más le dieron la espalda a la candidata derrotada, sin descartar que dentro de la UANL no todos jalaron la cuerda a favor de la causa priista.
Aunque puede generar cierta comezón en el equipo de colaboradores de “El Bronco” que sudaron la gota, el que un ex secretario de Medina de la Cruz pudiera influir en sus decisiones. Pero durante la campaña todas las aportaciones eran bienvenidas y sumadas a la causa.
Seguramente el ex rector no tendrá un puesto en el gabinete, pero pudiera recomendar a gente afín, entre ellos a Juan Manuel Alvarado, un periodista reconocido en Nuevo León quien tiene amplia experiencia en asesorías de comunicación social.
Pero si alguien está bien amarrada en el próximo gobierno es Diana Adame, quien capoteó todos los temporales en los tres meses de campaña como responsable de prensa y comunicación social de “El Bronco”.
Ella es egresada de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UANL.
Quienes seguramente formarán parte del gobierno son Fernando Elizondo Barragán (jefe de Gabinete o Tesorería); Fernando Turner García (secretario de Desarrollo Económico); Manuel González Flores (secretario General de Gobierno) y Roberto Flores (procurador de Justicia).
Pero hay otros como Rogelio Benavides Pintos, Roberto Adame y Esteban Tello Romero, este último dirigente en Nuevo León del Partido Encuentro Social (PES). Sin embargo, según el futuro gobernador, los colaboradores más cercanos serán confirmados a finales de septiembre.
En donde se siguen buscando a los culpables del desastre electoral del Revolucionario Institucional es en el equipo de asesores de Álvarez García, apuntando los cañones a dos hijos de Rubén Zarazúa Rocha, viejo ex militante tricolor, de nombres Roberto y Rubén.
Resulta que estos dos vástagos de quien fue procurador de Justicia del Estado fueron los encuestadores de cabecera de la candidata que deberá pronto reintegrarse a sus labores en el Senado de la República.
Ambos Zarazúa fueron los culpables de mantener engañada durante tres meses no solamente a la candidata, sino a los financieros y al equipo de campaña, con la mentira de que Álvarez García ganaría la contienda.
Los susodichos presentaban resultados de encuestas falsas, afirmando que llevaba una clara ventaja ante sus contrincantes, sobre todo ante el candidato independiente, porque el panista Felipe de Jesús Cantú estaba más frío que un esquimal del Polo Norte.
Y otro encuestador fallido que se anda promoviendo dizque para colaborar con la futura administración estatal es Mentor Tijerina, mejor conocido como el esposo de la senadora Marcela Guerra. Más falso que un billete de 15 pesos.
Por otro lado, en el recuento de perdedores del 7 de junio que tienen un futuro incierto están los alcaldes de Guadalupe, Escobedo y Apodaca, César Garza, César Cavazos y Raymundo Flores, respectivamente, porque durante seis años verán los toros desde la barrera.
Sobra decir que Medina de la Cruz los marginó al repartir a sus amigos las candidaturas a diputados locales y federales, con la excusa de que si “chapulineaban” sería en perjuicio del Revolucionario Institucional. Y ¡sopas!, se quedaron como sin melón y sin sandía.
Pero el más preocupado debe ser César Garza, porque Guadalupe fue verdaderamente un botín con empresas con prestanombres que saquearon las arcas públicas. Otro que deberá ir reservando una celda VIP en el Penal del Topo Chico es el de Juárez, el cetemista-panista Rodolfo Ambriz.
Una vez jurado en su cargo de gobernador el 4 de octubre próximo, Rodríguez Calderón empezará a cambiar a los delegados de dependencias federales.
Así que viene duro el desempleo en la burocracia estatal y en las municipales, en especial en Monterrey, García y Juárez donde hubo alternancia.