El pasado 4 de diciembre Jaime Rodríguez Calderón, o sea el gobernador de Nuevo León, o sea “El Bronco”, se aventó una declaración que en el Estado pocos esperaban cuando faltan menos de dos años para que entregue el poder: quiere volver a ser candidato a la presidencia de la República en 2024.
Los 2 millones 961 mil 732 votos que obtuvo en los comicios del año pasado, según resultados oficiales del Instituto Nacional Electoral (INE), “fue una cifra exitosa” pese a tener en contra la corriente que favorecía al actual presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Tome la decisión, con la responsabilidad, sabiendo que no tenía esa posibilidad de ganar, lo sabía, pero creo que tuvimos resultados exitosos, porque haber sacado ese número de votos era importante, sin tener una estructura política en el país, utilizando simplemente la red digital. Nos dio un buen resultado y me atrevería de nuevo, claro que lo haría”, declaró Rodríguez Calderón.
La entrevista del titular del ejecutivo estatal y ex candidato presidencial al rotativo de la CDMX causó extrañeza, pues a los medios de comunicación de Nuevo León los mantiene a raya desde que se fue a la campaña a comienzos de 2018, decisión que también fue criticada por muchos sectores de la sociedad.
Y sobre ese tema “El Bronco” respondió a El Heraldo: “Me eché encima a todos los políticos de Nuevo León; obviamente no les convengo a los tradicionales”.
Entre otros temas fue crítico sobre las decisiones tomadas por López Obrador: “El Presidente quiere resolver la pobreza, cuando lo primero es generar riqueza”.
Dijo que cuando termine su mandato en 2021, contrario a lo que sucedió el año pasado, “tendré tres años para recorrer el país y crear una estructura”.
En charla con directivos, periodistas y columnistas del medio capitalino, resaltó como uno de sus principales logros el cierre del Penal del Topo Chico, rehén de autogobiernos del crimen organizado y escenario de motines con saldos mortales.
Como contexto estadístico hay que decir que en las elecciones para gobernador de 2015, cuando “El Bronco” hizo historia en el país al ganar y jurar como el primer gobernador independiente (sin partido), obtuvo 1 millón 20 mil votos, y tres años después (2018) en Nuevo León logró 360 mil.
Pero antes de pensar en 2024 Rodríguez Calderón tiene como reto superar la aduana en los comicios de 2021, metiendo al Congreso local diputados afines a la causa ciudadana para defender las cuentas públicas que heredará a la siguiente legislatura.
Porque esta historia se pondrá color de hormiga cuando asuma el próximo gobernador, sea de cualquier partido político, pues las probabilidades de que repita un independiente o ciudadano son menos que mínimas, según las encuestadoras serias como Hora Cero.
“El Bronco” ha cambiado de estrategia contra sus detractores, sobre todo con los medios de comunicación hostiles en su campaña de 2015 como Multimedios-Milenio, TV Azteca-El Horizonte y Televisa Monterrey, chorreando más presupuesto para la difusión de sus actividades.
Ese sutil cambio ayuda a la causa para lo que resta de su administración, en especial cuando se conozcan los candidatos afines a él para que no sean agarrados como piñata por la prensa que, dicho sea de paso, tampoco lo favoreció en la campaña presidencial de 2018.
Por cierto, sigue en pausa en suspenso la sanción que recibirá por parte del Poder Legislativo el secretario general de Gobierno, Manuel González Flores, por el asunto de la supuesta ilegalidad en la recolección de firmas para que “El Bronco” fuera aspirante a Los Pinos.
Hay que recordar que el ejecutivo estatal tiene en la mira a González Flores y a César Valdés Martínez, subsecretario de Desarrollo Social, como prospectos para sucederlo enarbolando una misión casi imposible.
Sin embargo Valdés Martínez bien podría meterle seso y mejor aspirar de nuevo a ser candidato a la alcaldía de García, dejándole el paso libre a González Flores si no es desactivado por el Congreso con la decisión para participar en las elecciones de 2021.
Y si gana, la primera dama de García sería Diana Adame, su esposa y directora de comunicación social del gobierno del Estado desde que empezó el sexenio.
Quien terminará bien la legislatura local es el diputado Alvaro Ibarra Hinojosa en cuanto a iniciativas presentadas y aprobadas, y está pensando seriamente en buscar de nuevo una curul en el Congreso de la Unión en 2021 respaldado obviamente el PRI.
Ibarra Hinojosa fue secretario general de Gobierno con Rodrigo Medina de la Cruz, diputado federal en la legislatura anterior y coordinador de la fracción de de Nuevo León cuando el tricolor tenía músculos en la Cámara Baja. Y extraña la grilla de nivel superior y en el mejor de los cuadriláteros.
Será a mediados de diciembre o comienzos de enero cuando Waldo Fernández deje la secretaría de Gobernación para volver a Nuevo León con la misión especial de defender la 4T y conciliar a las tribus de MORENA que salieron peor de salvajes que el PRD.
Se sabe que hubo reversa para que Fernández entrara en lugar de Judith Díaz como coordinadora de los programas sociales del gobierno federal, sin embargo será la ventanilla única de MORENA para todos los asuntos. Y todos son todos.
Un tema espinoso que tendrá en sus manos es la posibilidad de que Clara Luz Flores, alcaldesa de Escobedo, pueda ser candidata de su partido a gobernadora una vez que renuncie al Partido Revolucionario Institucional.
Esa candidatura es cada vez más probable ante el poco interés que muestra la diputada federal y co coordinadora de la fracción de MORENA en el Congreso de la Unión, Tatiana Clouthier, de presentarse a las urnas en 2021.
En otro tema y ante la descobijada que sufrió de tener presencia activa en posadas organizadas con dinero del municipio de Monterrey donde él era el actor principal y repartidor de regalos, Francisco Cienfuegos se puso en pausa para no arriesgarse más.
El coordinador de los diputados locales del PRI contó hasta 10 antes de seguir caminando sobre la cuerda floja y sin red de protección, para no violar las leyes electorales sobre actos anticipados de campaña.
Para nadie es un secreto que Cienfuegos busca ser candidato a la alcaldía de Monterrey con el total apoyo del CEN tricolor, pese a la resistencia de algunos correligionarios y detractores como Héctor Gutiérrez de la Garza, Felipe Enríquez y Jorge Mendoza.
Los tres mosqueteros Gutiérrez-Enríquez-Mendoza seguramente usarán a su favor fotos y videos donde Cienfuegos asistió a las posadas del municipio para intentar sacarle la tarjeta roja llegado el momento y borrarlo del mapa.
O sea que el fuego amigo en el PRI se pondrá harto interesante y llegará a los tribunales electorales. Por eso hay que separar butaca en 2020 y renovar el abono para el primer semestre de 2021.
¡Feliz Navidad! a los lectores de esta columna les desea El Sultán.