Regresaron de Medellín, Antioquia, Jaime Rodríguez “El Bronco” y sus más cercanos colaboradores, cargados de ideas y proyectos, pero ahora falta lana para llevar a cabo cientos de planes gubernamentales.
Saben que el gobierno que reciben está en quiebra, que requieren que todos los ciudadanos contribuyan con el pago de sus impuestos, trámites, derechos, multas, infracciones y sobrecargos para poder hacer frente a tan enorme endeudamiento gubernamental.
Sí hay ideas y muchas, y “El Bronco” puede encabezar el mejor gobierno del que se tenga historia, pero va a necesitar mucho más que buenas intenciones, planes y proyectos.
Sus buenos dotes de negociador le deben multiplicar los apoyos que Nuevo León recibe de la Federación. Su reunión con el Presidente Peña Nieto no sólo debe ser para la foto, ojalá y sirva para apoyar cuanto proyecto está en marcha y otros que pueda llevar a cabo con los dineros de la entidad que se van al centro y de ahí para otros estados.
Los hombres de confianza del gobernador Electo de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, Manuel González Flores, Roberto Flores Treviño y Roel Guajardo Cantú le serán muy útiles en este proceso de reconstrucción del gobierno que están planeando para los próximos seis años.
Como dijo Manuel González, futuro secretario general de Gobierno: los vamos a sorprender. Nuevo León espera mucho de “El Bronco” y de sus hombres más cercanos, pero todos esos planes pueden toparse con muro si no hay los recursos suficientes.
“El Bronco” requiere de una gran ingeniería financiera, debe tejer con frialdad acuerdos que le permitan hacer mucho con poco y satisfacer las expectativas de los ciudadanos de Nuevo León y allende las fronteras.
¿Cuántos más como Fernando Elizondo se necesitan para poder construir un programa de ingresos que permitan a Nuevo León crecer?
No será fácil, pero hombres como Manuel González Flores y Fernando Elizondo deben contribuir a tejer esa red de relaciones con el centro para poder hacer de Nuevo León un estado líder, vanguardista y capaz de captar futuras inversiones.
Desde ya, Manuel sostiene reuniones con diputados locales y líderes de partidos políticos para llegar a acuerdos que le permitan a “El Bronco” transitar con gobernabilidad en los grandes planes que tienen previstos.
Importante es sostener reuniones con los secretarios de Estado como Ildefonso Guajardo, secretario de Economía; Emilio Chuayffet, secretario de Educación; Luis Videgaray Caso, secretario de Hacienda y otros tantos funcionarios del gabinete peñista, para ganar recursos que se puedan aplicar en los programas gubernamentales que impulsará Jaime Rodríguez.
Mucho se puede hacer mediante un buen trabajo de sinergias con diputados federales y senadoras de la República. Desde el Congreso de la Unión, estos legisladores no pueden dejar morir al estado y habrá que influir en sus agendas para que hagan algo por Nuevo León.
Son tiempos de echar mano de todas las fuerzas políticas, sociales, sindicales y empresariales. Nuevo León tiene fe en el gobernador electo y en los hombres que ya se han filtrado como futuros miembros del gabinete del Bronco.
Muchos se han sumado y otro tanto falta por sumarse al proyecto, la pregunta sigue siendo ¿cómo hacerse de más lana? Por lo pronto, Manuel González habló claro con los diputados locales del PAN, que insistían en retirar el impuesto a la tenencia. Esta contribución se queda porque no afecta a las grandes mayorías.
Igual de claros deberán ser los colaboradores de Jaime Rodríguez con el resto de los ingresos que aplica Nuevo León a los contribuyentes, porque se necesitarán de muchos miles de millones de pesos para enfrentar el duro reto de gobernar un estado técnicamente en quiebra.