Durante la semana se despejó la duda y al final el lanzador regiomontano Edgar González decidió viajar a Arizona, a los campos de entrenamiento de grandes ligas, para tratar de enrolarse con los Diamantes de Arizona o bien con los Rockies de Colorado.
Luego de su difícil paso por el beisbol de Corea en donde sólo estuvo cuatro meses, Edgar busca retomar su carrera y regresar al mejor beisbol del mundo.
Sultanes de Monterrey y su afición se ilusionaron con la posibilidad de que el de San Nicolás se quedara para el resto de la temporada, e incluso llegó a entrenar con el uniforme de los regios, pero al final tomó la decisión de viajar para buscar un lugar en ligas menores y de ahí dar el salto una vez más al Big Show.
La directiva de los Fantasmas Grises trató de convencerlo de que se quedara y que en lugar de que fuera observado sólo por dos equipos, estuviera en el aparador de los 30 clubes, pero el serpentinero optó por ir a la unión americana.
Suerte, y ojalá que pronto lo veamos en la gran carpa de regreso y que no vaya a ser otro de los peloteros a los que se les promete el cielo y las estrellas, y luego no le dan la oportunidad siquiera de demostrar si pueden o no.
Siguiendo con los lanzadores de los Sultanes, una semana complicada fue la que tuvo el dominicano Wilton Chávez, quien puso a dudar a más de uno luego de que no lograba la victoria en sus últimas salidas hasta que tuvo una muy buena actuación ante los Dorados de Chihuahua el pasado 8 de junio.
A pesar de que no había tenido tan mala labor, las victorias no llegaban y aunque él se sentía muy bien y sin problemas de su brazo nos confesó que se sorprendió de ver cómo la gente se preocupaba.
“Yo me sentía muy bien, pero de pronto comencé a escuchar voces de preocupación por que no se daban los resultados, sé que no estaba lo mejor que yo puedo estar, pero no siempre se va a ganar, si no estoy mal tengo 7 victorias y 2 derrotas, mi efectividad no es la mejor pero ahí estoy”.
Wilton nos confesó que en algún momento al escuchar historias que se hablaban sobre él, estuvo a punto de dar las gracias, tomar sus cosas y regresar a casa:
“Se comenzó a decir que yo salía en las noches, que me estaba descuidando y no sé qué tantas cosas que no eran verdad, pero la gente que habla eso en realidad no me conoce, sé que no voy a ganar todos los días, pero cada que salgo a la loma mi deseo es de conseguir la victoria, así que deben de estar tranquilos”, fueron las palabras de La Flecha.
Se los comentamos la columna anterior sobre la posibilidad de que los Saraperos de Saltillo realizaran un movimiento con el dominicano Sandy Madera.
Pese a que estaba en el tercer lugar de los mejores bateadores de la liga, Saltillo decide darle las gracias y cambiarlo a Yucatán por un viejo conocido, el venezolano Willy Romero.
¿Pero cómo te deshaces de tu mejor bateador?, preguntarán algunos. La razón: no produce carreras. Y eso no es nuevo, ya que le pasó en el invierno con Mochis, en donde fue el Champion Bat de la liga, pero no empujaba carreras.
Saltillo regresa a José Miguel Mercedes, lanzador dominicano, y ahora la incógnita es saber si se deciden dejar al lanzador norteamericano Travis Minix o al tercer base Gabriel Martínez.
En grandes ligas, fue impresionante el debut del joven lanzador de 21 años Stephen Strasburg de los Nacionales de Washington al ponchar a 14 enemigos en 7 innings de trabajo ante los Piratas, para obtener su primera victoria en su carrera.
Con lanzamientos de casi 100 mph, Strasburg mostró por qué fue la primera selección del año pasado que levantó tanta expectación, a tal grado que por primera vez desde que los Nat’s inauguraron su nuevo estadio, éste se volvió a llenar.
Su segunda salida no fue tan espectacular ante Cleveland con 5.1 y sólo 8 k, pero consiguió su segunda victoria.
Dicen que es el nuevo Nolan Ryan, lo seguiremos y ya les estaremos comentando.
No se vayan, no tardamos en regresar.