A raíz de las documentos y otras pruebas presentadas por Hora Cero en la pasada edición sobre el contrato que obtuvo Francisco Reynaldo Cienfuegos Martínez en 2009, en plena campaña, han llegado rumores de otros negocios que hizo el ex funcionario del Gobierno de Nuevo León al amparo del poder que acumuló.
Sin embargo, en nuestros 13 años de existencia, las páginas de Hora Cero nunca se han llenado con chismes o versiones sin sustento.
En el periodismo que ejercemos –porque no conocemos otro– se investiga un caso hasta el fondo, se comprueban las presuntas irregularidades y se publica a detalle con todas y cada una de las pruebas: documentos oficiales, audios y videos, hasta donde sea posible, para que no quede ni una sola duda.
En el caso específico de Cienfuegos Martínez es cierto, aún no era funcionario del actual gobierno cuando su compañía Protege Servicios de Seguridad Privada, S.A. de C.V. obtuvo el contrato del Instituto Estatal de Cultura Física y Deportes (INDE), pero pudo haberlo rescindido cuando el PRI ganó la gubernatura en esas mismas semanas y se perfilaba como funcionario de alto nivel. Pero no lo hizo.
En mayo de 2009 Cienfuegos Martínez andaba en la campaña a gobernador y era proveedor del gobierno con su empresa; en julio ganó Rodrigo Medina de la Cruz y en octubre Paco Cienfuegos –como se le conoce–, ocupó la coordinación de Relaciones Públicas Interinstitucionales del Gobierno del Estado.
Qué digno hubiera sido que el dueño de Protege Servicios de Seguridad Privada, S.A. hubiera convocado a una rueda de prensa para anunciar que asumiría ese cargo y, al mismo tiempo, terminaría con el contrato con el INDE.
Pero seguramente no tubo intenciones de hacerlo, porque al final iba a cobrar los dos millones 562 mil 580 pesos del INDE (ya con IVA), bastante buenos para solventar gastos de su compañía, la misma que en julio de 2008 fue evidenciada metida en negocios fuera de la ley en otra dependencia estatal.
Claro que Paco Cienfuegos no iba a rescindir el contrato, ni tampoco respetaría la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos de Nuevo León que prohíbe a cualquier funcionario, del nivel que sea, ser también proveedor.
Pero como tenía acumulado tanto poder en sus manos, sobre todo en el año que duró como coordinador de Comunicación Social (enero 2010-febrero 2011), poco le importó también violar otras reglamentaciones como no haber dado de alta a su empresa en el Padrón de Proveedores del Gobierno.
Y aunque desde dentro del gobierno quieran enredar las cosas, esa empresa cobró los dos millones 562 mil pesos de manera irregular, privilegiada en pagos puntuales por alguien dentro de la Tesorería que ya no está: el también despedido ex titular de la dependencia, Alfredo Garza de la Garza.
Melody Falcó Díaz, directora del INDE, miente cuando dice que Protege Servicios de Seguridad Privada, S.A. no tenía que estar dada de alta en el Padrón de Proveedores porque brindaba un servicio y no era una compra. (Leer entrevista en interiores).
Claro, Falcó Díaz tenía la forma para poder agilizar las transferencias bancarias a la empresa de Paco Cienfuegos, un funcionario con suficientes poderes dentro del Palacio de Gobierno y quien, llegado el momento, podría influir más arriba para mantenerse como directora del INDE.
¿Qué va a pasar con Paco Cienfuegos cuando regrese de sus vacaciones? Sabrá Dios. Se andaba promoviendo como jefe de la Oficina Ejecutiva del Gobernador que ocupa Carlos Almada López, una de las 14 carteras de mayor relevancia en el organigrama.
Por lo pronto, hay otro asunto igual o peor de ilegal que sucedió en Comunicación Social durante su corta gestión, mismo que se publica con todas las pruebas en esta edición de Hora Cero.
Paco Cienfuegos tuvo como segundo en la jerarquía, según la nómina publicada en Transparencia del gobierno, a Daniel De León Guzmán, quien no conforme con ganar un sueldo neto de casi 62 mil pesos mensuales como coordinador de Prensa y Difusión, utiliza prestanombres para ser proveedor en otros municipios y una dependencia estatal, al menos.
De León Guzmán tejió una red de negocios al amparo de Comunicación Social en la pasada y nueva administración estatal cobrando publicidad oficial en una revista que nadie conoce de nombre Ciudad, con una razón social denominada Corporativo Radio Tel and Publishing, S.A. de C.V., con domicilio en Modesto Arreola 508 entre Zaragoza y Escobedo.
Por coincidencia, a dos cuadras del radio de operaciones de De León Guzmán, quien despacha entre Palacio de Gobierno y el edificio Elizondo Páez (5 de Mayo entre Zaragoza y Escobedo, donde tenía sus oficinas Paco Cienfuegos.
Los prestanombres de quien alguna vez fue director de Comunicación Social de Apodaca son, según los datos del acta constitutiva consultada por Hora Cero, dos comerciantes que se dedican a todo, menos a medios de comunicación.
De León Guzmán no es el único culpable de su bonanza económica. Tiene como cómplice a un sistema que tolera eso y más, pero sobre todo su principal aliado es la impunidad, la principal cobija de los funcionarios públicos.
Quien tiene la oportunidad de demostrar mano dura y enseñar los músculos es el alcalde de Apodaca, Benito Caballero Garza: por un lado, contra el prestanombres de la empresa que es empleado y proveedor, al menos en los hechos; y contra el verdadero beneficiado del erario: De León Guzmán, uno de los hombres de confianza de Paco Cienfuegos cuando trabajaban juntos.
Mientras tanto hay que esperar si a Paco Cienfuegos se le cumple el sueño de ser jefe de la Oficina Ejecutiva del Gobernador. O en el mejor de los casos Medina de la Cruz aprovecha la denuncia periodística para quitárselo de encima y mandar un mensaje de intolerancia a la corrupción en su mandato. Está a tiempo.