
Estaba el otro día abriendo los regalos navideños que me mandaron por anticipado algunos políticos que buscan un puesto de elección popular para seguir prendidos del erario, cuando me enteré que la tropa de Televisa Monterrey anda bien encabritada con el gerente de noticias, Roldán Trujillo Yáñez.
Resulta que durante muchos años los empleados del área de noticias que trabajaban el 24, 25 y 26 de diciembre, tenían como premio descansar el 30 y 31, además del primero de enero, y viceversa, pero de golpe y porrazo se sintió la mano dura del ex Norte.
La lógica es que esos días baja drásticamente la actividad en las fuentes informativas de gobierno, universidades y empresariales, las principales generadoras de noticias, por lo cual era innecesario que trabajaran todos los reporteros y camarógrafos de Televisa Monterrey.
Esa prestación, por así llamarla, era autorizada también por el sindicato y beneficiaba de igual manera a los empleados de confianza, pero este diciembre de 2015 ya no será aplicada, motivo por el cual Trujillo Yáñez anda en boca de todos los afectados, y no precisamente porque quieran desearle Feliz Navidad y Año Nuevo.
Sin bien los que despotrican no van a arriesgar su trabajo yendo con el nuevo director Ricardo Azcárraga, acudieron al Apuntador, convertido en su paño de lágrimas, y de manera anónima enviaron un desplegado a Hora Cero que en su momento se publicará.
Obviamente que las cuestiones personales e íntimas que en ese texto se ventilan a detalle, con nombres y apellidos de situaciones que pasan en Televisa Monterrey, no se darán a conocer por ética y política editorial, pero de antemano podemos decir que el ambiente es “muy muy hot”.
Y si de crisis se trata, resulta que en el periodicote de mi amigo de piquete de ombligo Alejandro “Alex” Junco de la Vega, la Posada del 17 de diciembre se realizaría en un espacio que sirve de bodega de las toneladas de rollos de papel donde se imprime El Norte, Metro y Sol.
Las medidas de austeridad aplicadas en la empresa de Zaragoza y 5 de Mayo orillaron a la gerencia a realizar la tradicional reunión navideña en sus mismas instalaciones, no como el año pasado cuando la posada tuvo lugar en un negocio de los Junco llamada Las Ventanas, ubicado en Washington entre Zuazua y Doctor Coss.
Al saber la noticia del cambio de sede la mayoría de los empleados empezaron a sacar el rosario para encomendarse a las veinte mil vírgenes (sin exagerar), porque están viendo cómo El Norte camina como los cangrejos, para atrás y sin ninguna red de protección.
Pero eso no es todo, los trabajadores del periodicote deberán pagar 50 pesos por chompa -¡hágame el refabrón cavor!-, como si fueran a ir a una fiesta de una empresa extraña. De haber sabido Hora Cero los hubiera invitado a su parranda que tuvo lugar el sábado 6 de diciembre pasado.
Hablando de ese aquelarre, la gente de Hora Cero Nuevo León obtuvo los mejores regalos como Martín Fuentes, editor de espectáculos, que se ganó un refrigerador modelo 2015; el diseñador Enrique Riojas, una sala de tapiz italiano; la reportera Alondra Pedraza, un minicomponente de alta tecnología japonesa, y el editor general Miguel Arritola una gripa marca diablo.
Alejado por el momento de la burocracia en temas de comunicación social, el ex reportero de El Norte, Televisa Monterrey y Multimedios, Edgar Martínez, está estrenando nuevo local de su negocio como micro-empresario dedicado a la manufactura de máscaras y vestimenta para luchadores.
El también ex jefe de prensa en Apodaca y la Comisión de Transparencia y Acceso a la Información de Nuevo León (CTAINL) lleva firme el paso para posicionar la marca Masked en ese ambiente de los costalazos. ¡Buena suerte en su cambio a San Nicolás de los Garza!
En otros asuntos, surgido de lo que era una empresa radiofónica y televisa en boga, Multimedios Estrellas de Oro, fundada por Jesús Dionisio González, el Diario de Monterrey surgió hace 40 años como una opción periodística que enfrentaría en las calles a otros impresos, todos con largas trayectorias e influencias en la Sultana del Norte, como era El Porvenir, El Norte y Tribuna de Monterrey.
A lo largo de cuatro décadas, ese rotativo ha tenido auges y caídas, avances y retrocesos, éxitos y fracasos como la creación de Express, una edición nocturna fallida que constituyó en los años 90 más dolores de cabeza y pérdidas económicas, que éxitos y logros.
También fue cantera, escuela, casa y cuna de decenas -o quizás centenas- de profesionales del periodismo, las relaciones publicas, el diseño gráfico, el fotoperiodismo, la publicidad y las ventas, así como fuente de empleo y trampolín profesional para muchos que emigraron a otros medios, Estados y países en pos de sueños y proyectos.
Ahora, a 40 años de su primera edición impresa, con los colores azul y blanco en su cabezal (así se le llama al logo o emblema, por si preguntan), olvidados, incluso con su hemeroteca desaparecida o destruida por el paso del tiempo, el clima y la indolencia, el Diario de Monterrey se llama ahora Milenio, sin la referencia a la ciudad que lo vio nacer y prácticamente sin contenido local que lo caracterizó por varias décadas hasta el cambio de rumbo e intereses.
Sin un evento y sólo con una sencilla edición especial, en la que mencionó a muchos de sus colaboradores, pero se excluyó como siempre (y eso causó mucho enojo) a los escasos reporteros que aún siguen en la empresa, se quiso conmemorar los primeros 40 años del rotativo que en la actualidad dirige telefónicamente Carlos Marín desde la Ciudad de México, se apresta al futuro, como decía el mensaje de su columna Trascendió:
“Que en un día como hoy, 22 de noviembre, pero de hace 40 años, nació El Diario de Monterrey, lo que daría origen a Milenio Diario en el año 2000, y hoy por hoy uno de los periódicos nacionales más importantes.
“Son cuatro décadas de informar, desde 1974, de la mano de Multimedios Televisión y de Multimedios Radio.
“Cuatro décadas de periodismo impreso que ven hacia el futuro a través de nuestras páginas web en las diversas plazas del país con sede en la Ciudad de México.
“Milenio Diario, 40 años de historia viendo hacia el futuro del periodismo…”.
En un análisis de contenido editorial de Milenio Diario elaborado por alumnos de la Universidad Autónoma de Nuevo León, en la carrera de Ciencias de la Comunicación, se destaca que del 100 por ciento de la información publicada digamos el 25 de noviembre, menos del 10 por ciento pertenece o tiene relación con Nuevo León y la zona metropolitana de Monterrey.
Y pasan a desglosar: quitando la portada y la contraportada, esta última dedicada a publicidad, hay de entrada tres páginas de editoriales y columnas, dos páginas dedicadas al llamado tema del día (ya sea un tema local o regional o nacional), y a partir de la página 8 empieza la sección Metrópoli con siete hojas en los que se incluyen edictos, publicidad y otros anuncios, para dejar sólo huecos para incluir 14 notas informativas y sus fotos. Es decir, un promedio de una noticia por página.
Vaya, tan sólo el suplemento de El Mundo cuenta día a día con 12 páginas en las que se incluyen decenas de notas, reportajes, artículos de opinión y editoriales. Y en el caso de La Afición, su sección deportiva, de las 12 páginas, nueve están dedicadas a temas fuera de Nuevo León, con apenas cuatro o cinco notas referentes al Estado. Y ¿qué creen? Casi todas son de Tigres, Rayados y párele de contar.
¿Más estadísticas? Con Tendencias y QrQ (Quien Resulte Responsable), y las dos páginas del Financial Times y los temas nacionales, incluida las dos páginas completas de Cultura, peeeeeeero de la Ciudad de México u otras latitudes, el contenido local está prácticamente ausente de Milenio.
¿Será por eso que prácticamente las ventas de ejemplares en las calles, tiendas comerciales o de conveniencia y las suscripciones domiciliarias han caído en los últimos años? Sólo la familia González dueña del rotativo sabe la verdad.
Enseguida una lista de reporteros que, muy a tiempo, abandonaron El Diario de Monterrey para irse a triunfar al extranjero y a otras instituciones.
Una advertencia a jóvenes que entran encandilados por el logotipo, por los personajes chafas que salen en Canal 12 como Chavana, Mario Bezárez, Conan, Poncho De Nigris y el Hijo del Ninja, sólo por citar algunos, para que toquen otras puertas y busquen otros horizontes… porque nunca será tarde.
Silvia Lidia González fue reportera de espectáculos de El Diario y subdirectora editorial, renunció para irse a vivir, estudiar o trabajar a Estados Unidos, España, Francia, Venezuela y Japón, este último país donde es catedrática de una universidad privada. Además tiene una maestría y un doctorado por el prestigiado Colegio de México.
Liliana González fue editora y reportera. Viajó a España a estudiar una maestría y luego a Estados Unidos donde trabajó en la prestigiada cadena de noticias CNN, y actualmente está en Univisión en Washington D.C.
Sanjuana Martínez fue reportera de cultura y espectáculos. También se fue a España a cursar una maestría donde por más de 10 años fue corresponsal de la revista Proceso. Actualmente es una reconocida columnista, reportera de investigación y autora de libros.
Ramón Rodríguez Reyna (QEPD). Con una carrera magisterial empezó como corrector de estilo y fue reportero de información local. En 1990 fue contratado por la agencia Notimex para radicar en Texas, luego en Washington D.C. y terminó en Miami, Florida.
Alma Leticia García fue reportera y editora. Después de El Diario de Monterrey estuvo en El Norte y luego pasó a las filas académicas. A la fecha trabaja en la Universidad de Monterrey como catedrática y es la encargada de la agencia informativa UdeM que fundó Silvia Lidia González.
Diego Enrique Osorno. Fue reportero y a comienzos del nuevo siglo renunció para experimentar otros ambientes. Colabora con reportajes en prestigiadas revistas como Gatopardo, de Colombia; es autor de varios libros; ha sido finalista y recibido premios de periodismo y como codirector de un largometraje.
Héctor Hugo Jiménez fue reportero, editor y jefe de la sección deportiva de El Diario de Monterrey; renunció para irse de corresponsal a Italia de Notimex; regresó en 1995 para incorporarse a El Norte y TV Azteca México; antes fue corresponsal de guerra en la ex Yugoslavia. Desde su fundación en 1998 es director editorial general de Hora Cero.
Mil disculpas de El Apuntador por omisiones en cuanto a otros reporteros que tiraron el arpa y dejaron la empresa de los González muy a tiempo. Y aclarando: la mayoría sin resentimientos. Pero también hay que decir que los que permanecieron como José de la Luz, Joel Sampayo Climaco y Francisco Zúñiga, entre otros, tienen una virtud: la lealtad.
MAL GUSTO
Pese a tener ya varios meses a cuadro, Gil Garza, comentarista de espectáculos del Telediario Vespertino que conduce María Julia “La comadre” Lafuente, ha resultado antipático hasta para quienes producen ese segmento informativo.
Al pretender ser gracioso, Garza ha cometido varios errores y ha hecho comentarios indebidos, subidos a veces de tono o fuera de lugar, ocasionándole algunos regaños y hasta advertencias: si no se corrige, va para afuera. Pero por más sentencias y amenazas no se le ve color ni sabor.
Vaya, mencionan que la titular de ese espacio informativo, la licenciada Lafuente, hasta ha dicho que extraña al anterior comentarista Alberto Santos pero sin posibilidades de que haya cambios en ese aspecto.
Y ya que hablamos de espectáculos, resulta que en Multimedios ya se calificó como divas insoportables a Edgar Leal y Abelardo Luzania, quienes se ostentan como los mandamases de ese departamento y con capacidad para correr productores y camarógrafos, y hacer lo que quieran cuando quieren.
Vaya ni Eloísa Guajardo, que por años ostentaba el título de ser la más mal carácter en la televisora de la colonia Roma, ya fue superada por sus pupilos y desplazada de manera fea.
Y en TV Azteca Noreste también se cuecen habas: José Armando González, reportero de espectáculos y que sale en el programa Plan B como coconductor, también ya se ganó la antipatía de los compañeros de otros medios por sus actitudes de diva, prima donna y la flor más bella de la chinampa.
Al grado tal de que si los de casa no lo quieren, mucho menos los extraños. José Armando, a quien le dicen “el minijuanga” porque se da a la tarea de imitar al Divo de Juárez, ya recibió varias amenazas tras enfrentarse a gritos con varios reporteros de medios pequeños.
Pero todavía peor, su estilo no es original, pues chequen bien que se parece al de “La Comadre” Lafuente, a quien desde que era estudiante en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UANL no deja de admirar. Es su fan “number one”.
González está en TV Azteca Noreste porque no hay otra alternativa, porque a la primera invitación de María Julia avienta el arpa y se va con todo y chivas de la empresa de mi casi hermano Guillermo “Memo” Salinas Pliego. Sobre advertencia no hay engaño. Aunque uno de los más felices sería Sadrach Santos, quien ha perdido reflectores por culpa de su compañero de programa.
EN LA MIRA
En el Congreso de Nuevo León, concretamente en la Comisión de Educación, Cultura y Deporte, se evalúa el contenido de una queja o apercibimiento que se emitirá en una fecha aún por definir, en contra de la dirección de TV Nuevo León -o Canal 28– por el contenido perjudicial para los niños y jóvenes a través de un programa que se trasmite en ese medio público.
Padres de familia enviaron una queja por escrito a la presidenta de la comisión, la diputada del Panal María Dolores Leal Cantú, donde señalan que el programa La Hora de El Gordo y el Otro, que se trasmite los martes y jueves a las 14:00 horas, se denigra a la mujer y las jovencitas, se hace mofa o burla de las personas con discapacidad, y además se hacen referencias a temas de contenido sexual, lo cual va en contra de los principios de una televisora de carácter educativo y cultural como debe ser TV Nuevo León.
La queja de los ciudadanos va acompañada de la petición de que se suspenda en definitiva ese programa. Por eso mismo los legisladores que integran la comisión aún no definen la fecha en que se emitirá el resultado de la investigación.
Los diputados que analizarán el caso son, además de Leal Cantú, la panista Rebeca Clouthier Carrillo, Guadalupe Rodríguez Martínez, Celina del Carmen Hernández Garza, Jesús Briones López, Blanca Lilia Sandoval de León, Carolina María Garza Guerra y otros seis más.
Con facultades para emitir apercibimientos, o cuando menos la condena desde la tribuna, mal le podría ir al aún director de TV Nuevo León, Roberto Canales y colaboradores que lo acompañan, ya que sería la primera ocasión en que el Congreso emita un comentario sobre un programa de televisión.
Y aunque se “oiga feo” y se lea “pior”, los bodrios de Multimedios y uno que otro de Televisa Monterrey están peores en sus contenidos, pero nadie les dice nada. Pero por manejar recursos públicos, el Canal 28 sería ideal para enjuiciar por parte de la sociedad civil y el poder legislativo.
Aún no hay fecha en que se dé a conocer el dictamen, pero como dice mi compadre: “pa’l baile vamos”.
Un segmento muy ignorado por El Apuntador es el relacionado con los reporteros gráficos, mejor conocidos en ese mundo del hampa como fotógrafos de los periódicos, revistas, semanales, quincenales y agencias de noticias que cubren los partidos de futbol de Rayados y Tigres a nivel de cancha llueve, truene o caigan rayos y centellas.
Entre quienes no se pierden esta columna y aguantan vara cuando se les pone la tecla encima están: Antonio Ordaz y Miguel Ramírez, de El Norte; Emilio Vázquez y Andrea Jiménez, de Hora Cero (impreso y digital), y Edgar Montelongo, de La Afición y Milenio.
Pero la lista es mayor: Miguel Sierra, de la agencia española EFE; Julio César Aguilar, de la francesa AFP; Gabriela Pérez Montiel, de la agencia Cuartoscuro, además de Azael Rodríguez, del periódico El Horizonte.
Y de vez en cuando va a los estadios Juan José Cerón, editor en jefe del departamento de fotografía de El Norte, quien tiene la piel muy delgada cuando lee esta columna. Pero que es un gran reportero gráfico, no hay duda.
Donde hubo claroscuros durante la entrega de reconocimientos a egresados destacados fue en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UANL, que celebró sus 36 años de fundación el viernes 5 de diciembre pasado.
Resulta que uno de los eventos importantes fue la entrega de diplomas al mismo número de ex alumnos que han tenido una carrera brillante, una buena idea del director Mario Rojo. Sin embargo hubo un detalle que incomodó a la mayoría.
Fue en relación al trato distinto que recibió Guillermo del Bosque, productor de Televisa México y que pasó por las aulas como estudiante quien, diferente a los restantes 35, fue objeto de un homenaje en vez de reconocimiento. Y nadie cuestiona que bien merecido por ser “hijo destacado” de la facultad.
Otro punto a favor de Rojo fue que en esta ocasión hubo variedad en la lista de egresados con trayectorias destacadas, pues no salían de los mismos. ¡Aplausos!
Hay nombres como Miguel Ángel González Arritola, Hernando Sóstenes Garza, Mario Palacios, César Cepeda, Alejandro Salas, Aracely Carrillo, Jacqueline Lerma, Ernesto Jiménez, Miguel Ángel Vargas, Raymundo Pérez Arellano y muchos, muchos más que deben estar en futuras listas.
Y dentro de la política y la comunicación social hay que mencionar al alcalde de Santa Catarina, Víctor Pérez, también egresado, y ex reporteros como Enrique Patiño, de Escobedo; Clemente Almaraz, de Apodaca; Rafael Heredia, de San Nicolás; Blanca Esthela Martínez, de la CNA, y José Luis Carrillo, ex de Escobedo, Monterrey y actualmente jefe de prensa del ayuntamiento de Saltillo, entre un montón de egresados con carreras ascendentes.
Como parte de la celebración se recordó al maestro Silvino Jaramillo (QEPD), quien próximamente tendrá su busto en un lugar muy especial de la autoría del famoso escultor Cuauhtémoc Zamudio. Una de sus hijas asistió representando a la familia y leyó un texto en su memoria.
Y ahora la tradicional y esperada pregunta de la quincena: ¿quién es la ex conductora de televisión que aventó el arpa al ver que la tele ya no “deja”, encontró el amor y les dijo a los medios de comunicación: “ai se ven”?