por LUCIANO CAMPOS
Con Enredados, Disney vuelve a transformar otro clásico en un triunfo cinematográfico para toda la familia. Los hermanos Grimm podrían sentirse orgullosos de la más reciente lectura del cuento de Rapunzel, la chica atrapada en una torre a la que le crecía el cabello desmesuradamente a causa de un antiguo hechizo.
El encantamiento que provocaba la elongación interminable fue su salvación al nacer pero, al mismo tiempo, selló su triste destino de prisionera.
Hasta que un apuesto joven valiente asciende a la guarida y encuentra a la singular chica de cabellos de oro.
Enredados sorprende por su guión inteligente escrito para un público infantil, con situaciones que la llevan en un ritmo ascendente, dentro de una anécdota llena de convenciones, pero que se convierte en entretenimiento puro.
La compañía del Ratón Miguelito hace lo que mejor sabe al conseguir que una historia ya conocida renazca con personajes atractivos y una técnica de imaginería visual de vanguardia, rivalizando con Pixar y Dream Works que en cada lanzamiento innovan el mercado.
En la versión en español, Chayanne y Dana Paola hacen un gran trabajo, como la pareja romántica que -¡oh, sorpresa!- comienza odiándose para terminar convirtiéndose en un duo genial capaz de superar cualquier obstáculo y con tan buena química que terminan transformando su amistad en algo más.
Los muchachos no podían ser más opuestos: ella cándida y temerosa, desprevenida de las acechanzas del mundo. Él, un pícaro, bandido, ladrón, de buen corazón, claro, que está dispuesto a traicionar a sus compinches, hasta que se mira en los ojos azules de la doncella.
Tan divertidos como la pareja son los personajes secundarios que los respaldan, como la partida de gamberros con los que se encuentran en la taberna a la que imprudentemente lleva el muchacho a la chica. La hilarante escena es una propuesta de ironía y acción: los feroces criminales caen rendidos por el candor de la ingenua damisela que, involuntariamente los anima a explorar el lado sensible de sus endurecidos corazones.
Frente a ellos está un buen antagonista, la bruja Gothel, madre de Rapunzel, una mujer abominable que es descrita con habilidad como una mujer egoísta pero, sobre todo, un genio del chantaje. La mujer secuestra a Rapunzel para beneficiarse de los dones de su cabello y conservarse por siempre hermosa y juvenil, hasta que ella se entera del timo.
Hay lágrimas, risas, mucho romance y, afortunadamente acción a raudales.
Enredados es una película irreverente que, pudiendo enmarcarse en la cursilería que todo lo endulza y todo lo vende, opta por hacer mofa de todos los personajes para hacer de esta una película que será la favorita de las niñas en este invierno.
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